El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana de España ha aprobado el proyecto de remodelación del Mercado de Abastos de Benavente, al que destina 2,4 millones de euros.
La inversión permitirá la conversión del viejo inmueble, actualmente en desuso, en sede de permanente de exposiciones y de la biblioteca municipal, que será trasladada desde el Centro Cultural Soledad González, espacio que podría convertir a partir de entonces en el museo de la ciudad.
La inversión global asciende a 3,4 millones, por lo que el Ayuntamiento de Benavente tendrá que aportar el millón de euros restante para completar la financiación de la actuación, una de las más importantes en la ciudad junto al Plan de Sostenibilidad de la Mota, en los próximos años.
El proyecto del Ayuntamiento benaventano ha sido el septuagésimo mejor puntuado de un total de 401 actuaciones aprobadas y procedentes de todo el país. La memoria inicial, que ahora tendrá que desarrollarse en proyecto de ejecución, permitirá licitar y comenzar a ejecutar las obras a partir del próximo año.
El objetivo de esta actuación es dinamizar el centro urbano con tres puntos de referencia cultural: el Museo de Benavente, el Gran Teatro Reina Sofía, y este centro cultural multiusos.
El Mercado de Abastos, tal y como está hoy por hoy, será vaciado completamente y se eliminarán todas las instalaciones obsoletas.
El proyecto apuesta por la dotación de medidas de accesibilidad que permitan acceder al futuro centro cultural mediante rampas tendidas y cómodas y ascensores. De esta forma no se tendrá que acceder obligatoriamente con las escaleras actuales que poseen una gran pendiente e impiden el acceso a personas con discapacidad.
Desde el punto de vista energético, el centro cultural multiusos tendrá un consumo casi nulo. Contará con una envolvente aislante, aerotermia, un sistema de ventilación con recuperadores de alta eficiencia, iluminación LED impulsada por placas fotovoltaicas, carpintería con vidrios bajo emisivos e iluminación natural con lucernarios. La estimación es que se reduzca más de un 30% el consumo de energía primaria no renovable.
La reforma tiene en cuenta medidas en pro de la digitalización del edificio, la creación de espacios inclusivos y accesibles, y áreas galerísticas en las que se dispondrán paneles y dispositivos informativos (físicos y digitales) y se realizarán actividades adaptadas a todas las edades, niveles de formación y discapacidades.
El diseño de la intervención ha tenido en cuenta la población potencialmente beneficiaria por el uso que se dará al inmueble y la recuperación de una infraestructura abandonada, “un elemento de empobrecimiento urbanístico, social y económico para transformarse en un espacio de encuentro y enriquecimiento social y cultural”.
