Atípica romería de Valderrey en Zamora, la tradición se cumple solo a medias

La lluvia impidió la procesión de primera hora de la mañana y el Cristo tuvo que ser trasladado a la ermita en una furgoneta

VÍDEO | La romería del Cristo de Valderrey se celebra a pesar de la lluvia

Alberto Ferreras

Cientos de personas han asistido este domingo a la romería del Cristo de Valderrey, quese ha desarrollo de forma atípica debido al tiempo cambiante. Eso ha hecho que la tradición sólo se cumpliera a medias, ya que a primera hora de la mañana tuvo que suspender la procesión romera con el Cristo prevista entre la iglesia románica del Espíritu Santo y la ermita que da nombre a la romería.

Sin embargo, a partir del mediodía el tiempo ha mejorado y cuando a las 13.30 horas el Cristo de Valderrey ha salido tras la misa a bendecir los campos incluso ha asomado tímidamente el sol.

A partir de entonces el tiempo ha mejorado pero las precipitaciones de la mañana han condicionado la presencia de zamoranos en la pradera de Valderrey, inferior a la de otros años.

El presidente de la cofradía, Antonio Martín Alén, ha explicado que en las más de tres décadas que lleva participando en la romería no recuerda otro año en el que la procesión haya tenido que suspenderse y el Cristo de Valderrey haya tenido que ser trasladado en furgoneta todo el trayecto, aunque en alguna ocasión sí ha habido que aligerar el recorrido por las precipitaciones.

La talla del siglo XVII que da nombre a la romería es un cristo de rogativa que se saca a los campos próximos a la ermita de Valderrey, algunos de ellos hoy en día convertidos en campo de golf, para pedir lluvias que traigan un buen año de cosechas. La menor presencia de romeros que otros años ha hecho que también se hayan resentido las ventas en las casetas hosteleras y los puestos que ofrecen avellanas, las típicas rosquillas del Cristo y otros dulces y frutos secos en las inmedaciones de la ermita.

La cofradía que organiza la romería se fundó en el primer cuarto del siglo XVIII y en sus orígenes estuvo ligada a la actividad agraria, motivo por el que el Cristo se saca a los campos para bendedirlos y pedir lluvia.