La Noche Blanca del Patrimonio Toresano desvela las novedades de esta edición

El Arco del Postigo es uno de los monumentos que se incorporan este año a la iniciativa, que de nuevo orquesta la visita en franjas horarias

Presentación del cartel de la Noche Blanca del Patrimonio Toresano. | M. J. Cachazo

Presentación del cartel de la Noche Blanca del Patrimonio Toresano. | M. J. Cachazo / Irene Barahona

Irene Barahona

La Noche Blanca del Patrimonio Toresano regresa tras dos años de parón, una de las propuestas más queridas que abre durante una noche la puerta a todos los lugares patrimoniales de la ciudad, un evento gratuito hecho por y para enamorarse de Toro.

“Tantos sitios y tanta gente deambulando”, ha resumido Tomás del Bien en la presentación de la noche, que este año se traslada a jueves, en concreto, será el 28 de julio cuando un total de 37 monumentos se abran a los visitantes de par en par, visitas que se aderezarán con actuaciones en directo por toda la ciudad.

Evitar que se celebre un viernes ha sido una de las medidas para intentar alejar el evento de la “masificación” de pasadas ediciones, como señaló del Bien, “no tiene sentido que haya colas de dos horas para entrar a los edificios” explicó sobre una jornada queva a ser el día antes de que empiecen las Noches de Toro, un pistoletazo de salida de lo que será agosto en la ciudad”, ha resumido el responsable sobre el porqué de la nueva organización.

Las visitas, como siempre, se orquestarán en diferentes franjas horarias. Los primeros en abrirse a la ciudad serán los conventos de clausura: De ocho de la tarde a once los visitantes podrán pasear por Sanctis Spiritus, Carmelitas, Santa Sofía Mercedarias y Santa Clara.

Entre las 9 y las 12 serán la iglesias de la ciudad las que reciban a los visitantes: Toro Sacro, Colegiata, San Lorenzo, Sepulcro, Salvador y San Sebastián, entre otras, como las parroquias de San Julián y Santo Tomás.

Una última tanda corresponderá a las dependencias municipales, entre las que están las cinco sedes de La Iberoamericana y como novedad, el Arco de Postigo facilitará visitas al Archivo Histórico, así como las bodegas del ayuntamiento y las de cuatro particulares, algunas de ellas del siglo XV.

El ultimo monumento en cerrar será la Plaza de Toros, que permanecerá abierta hasta las cinco de la mañana: “lo hacemos para que la gente disfrute y se empape del patrimonio” ha resumido del Bien sobre esta cita tan especial.

Suscríbete para seguir leyendo