El BIC de la Pasión de Bercianos protege sus ritos, documentos y bienes materiales

La Cofradía del Santo Entierro se marca como objetivo conseguir de la Unesco la declaración de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad

Procesión de La Carrera en la tarde de Jueves Santo en Bercianos de Aliste. | Ch. S.

Procesión de La Carrera en la tarde de Jueves Santo en Bercianos de Aliste. | Ch. S. / Chany Sebastián

La Semana Santa de Bercianos de Aliste fue la primera Pasión de Cristo, no sólo de España, sino de todo el mundo, en ser declarada oficialmente BIC (Bien de Interés Cultural) de Carácter Inmaterial, el día 10 de abril de 2014, por la Consejería y de Cultura y Turismo de la Junta de Castilla y León.

De acuerdo con la definición de Patrimonio Cultural Inmaterial adoptada en 2003 en la Conservación y Salvaguarda del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Unesco, se entiende como tal "los usos, representaciones, expresiones, conocimientos y técnicas –junto con los instrumentos, objetos afectados y espacios culturales que le son inherentes– que las comunidades, los grupos y también en algunos casos los individuos reconozcan como parte integrante de su patrimonio cultural".

Este patrimonio cultural inmaterial, que se transmite de generación en generación, es recreado constantemente por las comunidades y grupos en función de su entorno, su interacción con la naturaleza y su historia, infundiéndoles en sí un sentimiento de identidad y continuidad y contribuyendo de esta manera a promover el respeto de la diversidad cultural humana.

La peculiar Semana Santa de Bercianos de Aliste, en la provincia de Zamora, "constituye una relevante y singular manifestación cultural con orígenes en el siglo XVI y que se ha mantenido inalterada hasta nuestros días, trasmitiéndose de padres a hijos como un patrimonio vivo y seña de identidad de toda una comunidad".

La declaración como Bien de Interés Cultural Inmaterial) va más allá del conjunto de ceremonias y rituales, del lugar en el que se desarrollan y de los elementos materiales asociados, –como imágenes y objetos procesionales–, en el sentido de que la valoración y protección de esta expresión cultural debe entenderse de forma amplia, como un sistema de alto valor patrimonial caracterizado por la interdependencia de valores tangibles e intangibles, que abarca tanto una serie de ritos y costumbres, como una indumentaria tradicional, manifestaciones musicales o gastronómicas, entre otras, atendiendo y respetando los procesos de cambio que, como patrimonio vivo, sin pervertir su esencia, decida la comunidad depositaria de esta tradición como la auténtica protagonista de esta manifestación cultural.

El ámbito espacial viene predeterminado por el entorno urbano en el que tiene lugar las manifestaciones religiosas, los espacios religiosos o públicos vinculados a la iglesia y su entorno, como son el Calvario, Vía Crucis y los dos cementerios. El Vía Crucis que está formado por 14 estaciones y 16 cruces que se extienden desde la cabecera de la iglesia hasta el camposanto, frente al cual esta el Calvario con las cruces de Cristo, Gestas y Dimas.

En total son cinco las procesiones declaradas BIC: Entrada en Jerusalén (Domingo de Ramos), que se desarrolla alrededor de la iglesia parroquial de San Mamés; La Carrera de Jueves Santo (16.30 horas) y el Santo Entierro de Viernes Santo (16.30 horas) con ida y vuelta siguiendo el Vía Crucis hasta el Calvario; este mismo día la nocturna de la Virgen de la Soledad (22 horas del Viernes Santo) y la del Encuentro de Domingo de Pascua (12 horas), donde los hombres salen con Cristo por un lado y las mujeres por el otro con su Madre, para luego regresar juntos.

En cuanto a las imágenes incluidas en la declaración BIC están las del Cristo Crucificado, incluida su Urna, el Cristo de la Cofradía y la Virgen Dolorosa; así como los pendones, el negro y el morado.

El distintivo afecta directamente como parte de la Pasión de Cristo a las túnicas blancas de lino (Santo Entierro) y a los mantones y "toquillas de luto" de las mujeres; así como a las capas pardas alistanas de honras y respeto que antaño eran también las prendas a utilizar por los varones para guardar luto cuando fallecía un familiar: padres, esposa o hijos.

Aún siendo en si patrimonio material, más que inmaterial, son BIC la iglesia parroquial de San Mames y el Vía Crucis construido en cantería granítica de Fornillos, incluido el Calvario

Muchos son los valores significativos y relevantes de esta expresión religiosa y cultural como Bien de Interés Cultural: por un lado, una trayectoria histórica de más de 500 años, con referencias documentales en el siglo XV, cuya expresión más relevante son las bulas papales, la mas antigua otorgada por el pontífice Paulo III al cardenal Francisco de Quiñones a petición de la cofradía de la Santa Vera Cruz el día 7 de enero de 1536 en Roma, en la que se recogen una serie de privilegios concedidos a los cofrades, . La otra es la Bula de Indulgencia otorgada por el Papa Paulo V en 1618, en este caso a la cofradía de San Cosme y San Damián de Bercianos. Ambas bulas obviamente son también Bien de Interés Cultural.

Esencia, espíritu y religiosidad de la tradición berciana constituyen en sí mismo un hecho histórico y cultural de gran relevancia, transmitido y mantenido como patrimonio vivo por la comunidad.

Ahora el objetivo de la cofradía del Santo Entierro de Bercianos, presidida por Juan Lorenzo Blanco, es, sobre el estudio histórico del historiador José Luis Alonso Ponga (Universidad de Valladolid), que la Unesco declare a su Semana Santa como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.