Agua hasta el final: la procesión de la Resurrección, también suspendida en Zamora

“Salud para el año que viene”. Esa fue una de las frases que pudo oírse en los aledaños de la iglesia de la Horta donde tuvo lugar un acto que quiso recrear, en la medida de lo posible, el Encuentro en la Plaza Mayor porque la procesión de la Cofradía de la Resurrección, como otras seis de la Pasión de Zamora, tuvo que suspender por la lluvia.

“Las previsiones eran malas y a primera hora de la mañana me llamó la persona de enlace con la Aemet, Emeterio Aliste, y me dijo la lluvia iba a ser continua, con poco y mucha cantidad, pero de manera continua, por lo que hemos llevado a cabo lo que habíamos planteado como plan B”, explicó el presidente de la cofradía, Josué Crespo que aseguró que la suspensión fue “una decisión difícil, pero... la vida es así. Desde la época en la que José Francisco González Poza fue presidente no ha habido una suspensión”.

La cofradía ya había transmitido su intención de llevar a cabo un acto en el interior de la Horta en caso de suspensión, un anuncio producido en el momento de inicio de la procesión. A las nueve y media comenzó una misa, presidida por el capellán de Resurrección, quien aludió en su homilía a que se conmemora “la Pascua florida llena de flores que llena de luz la iglesia. Es el domingo de los domingos”.

“Este día acaba la Semana Santa y comenzamos un nuevo camino en el seguimiento de Cristo”, manifestó con el templo románico lleno de cofrades con su vara niqueladas coronadas por ramitos de flores y con los estandartes de la Virgen, a la izquierda, y el del Resucitado, a la derecha del presbiterio.

Tras concluir la celebración religiosa comenzaron a lanzar cohetes en el exterior del templo.

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Tras pedir en el interior varias veces silencio a fin de los cargadores oyeran bajo los banzos las órdenes, los hermanos levantaron a la Virgen de la Alegría. Cuando la imagen que hiciera Higinio Vázquez comenzó a moverse, levantaron al Resucitado, se le cayó el manto negro a la Virgen y comenzó a caer una lluvia de pétalo sobre las tallas y los presentes rompieron a aplaudir.

Ambos pasos comenzaron a bailar al unísono y la Banda de Música de Zamora y Luis Antonio Pedraza, quien tocó en varios momentos de la misa, interpretaron "la Suite Sayaguesa", como cuando el Encuentro tiene lugar en la plaza principal de la ciudad. Al sonar el último compás los presentes rompieron a aplaudir.

La ovación se fundió con el himno nacional momento en el que todos los cofrades, a los que este año se han sumando 76 incorporaciones, levantaron sus varas como hacen cuando los pasos acceden a La Horta. Al dejar de tocar la banda hubo nuevamente una ovación y cesaron de bailar las imágenes.

“Los hermanos han respondido, éramos conscientes de que hacía frío, pero se han dejado las puertas abiertas. Esta cofradía aglutina a mucha gente y ha sido una satisfacción ver la iglesia llena de varas floridas”, señaló el presidente mientras que se seguían escuchando los cohetes. “Salud para el próximo año y que nuestras familias estén bien”.