El CB Zamora Enamora tendrá que ganar en Benicarló (66-66)

El CB Zamora Enamora tendrá que ganar en su visita a Benicarló la próxima semana si quiere pasar la primera eliminatoria de un play-off que los jugadores de Saulo Hernández iniciaron con empate en el Ángel Nieto. Un "tropiezo" por en un duelo con arbitraje desigual en el que de poco valió el gran primer cuarto local. Pero, a pesar de la remontada castellonense, el bloque local no tiró la mano y al menos evitó que su contendiente se fuera con puntos de ventaja al poner Kalinicenko un inusual 66-66.

Con la ilusión por bandera y un pabellón con gran entrada animando desde el primer minuto a su equipo, los hombres de Saulo Hernández saltaron dispuestos a llevar las riendas del duelo. Así, y pese a que los visitantes abrieron el marcador con un triple, el cuadro zamorano respondió de inmediato con una canasta de Hustak y dos triples de Moyer y Opong para tomar la delantera en el marcador (8-3 ,m . 2).

Pese a que el parcial de 8-0 se vio interrumpido, no lo hizo el dominio de un CB Zamora Enamora muy enchufado y consciente del peligro de un Benicarló que seguía enganchado al partido gracias a su juego interior. Con todo, el fuerte inicio de ambos equipos se fue apagando para dar lugar a minutos con más fallos por parte de los jugadores. Tanto en el tiro, alcanzándose el intermedio del primer cuarto con 12-6, como en el control del balón. Y es que, la intensidad de los primeros minutos, había pasado factura.

El desgaste, sin embargo, no conllevó cambios de forma inmediata, todo lo contrario. Los dos cincos iniciales siguieron en pista y esa situación favoreció al CB Zamora Enamora porque, aunque Libroia anotó sus primeros puntos y Benicarló amagó con recortar diferencias, tanto Hustak como Opong vieron aro con facilidad a continuación para forzar el tiempo muerto visitante (19-8, m. 7). Un asueto en el que ya se movieron los dos banquillos.

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Naspler, Traoré, Persson y Sigismonti fueron entrando a la pista en los minutos finales del primer asalto en los que, con el base español siendo protagonista en la anotación, el CB Zamora Enamora logró afianzar su diferencia en el marcador cerrando con 23-10 sus primeros diez minutos de "play-off".

Kalinicenko, desde los tiros libres, puso los primeros puntos del segundo cuarto. Un parcial que, si bien arrancó con 15 puntos de ventaja para los locales, fue dominado en sus primeros compases por un Maderas Sorli Benicarló incisivo tanto bajo el aro rival como desde lejos. Los visitantes, con dos canastas desde el perímetro consecutivas, recortaron hasta situarse ocho puntos por debajo en el marcador y forzar el tiempo muerto de un Saulo Hernández en busca de respuestas (27-19, m. m. 13). El técnico volvió a apostar por las rotaciones y, entre ellas, dio entrada a Jacob Round cuyo regreso hizo levantar al público. Casi tanto como el triple de Opong para poner el 34-23 a poco menos de cinco minutos para el descanso. Una renta que no tardaría en volver a menguar.

Tras canastas consecutivas del Maderas Sorli Benicarló, cada vez más atento y sólido en tareas defensivas, daban lugar a un parcial de 0-7 que hacía encender las alarmas en el banquillo del CB Zamora Enamora (34-30). De ahí que Saulo Hernández usara un nuevo tiempo muerto, para romper el ritmo a los visitantes y recuperar algo de aliento con un triple de Moyer. Una canasta que llevó a los zamoranos a liderar el partido al paso por vestuarios con cinco puntos a su favor (37-32).

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Obligado de mejorar, el CB Zamora Enamora regresó a pista con su quinteto inicial salvo la inclusión de Naspler por Opong. Y si bien en los primeros minutos mandó en el marcador y llegó a estirar su ventaja a ocho puntos con un triple de Moyer, en los siguientes minutos el duelo se igualó pues Maderas Sorli Benicarló se aprovechó de la carga de faltas sobre el cuadro local. Cuatro sanciones consecutivas vio el equipo de Saulo Hernández, monopolizando el balón su oponente que, por medio de Libroia, igualaba el tanteo mediado el tercer parcial (42-42).

La revolución castellonense se vio sofocada por minutos con un parcial de 4-0 gracias a las canastas de Yates y Moyer que devolvieron los cinco puntos de ventaja perdidos en apenas un minuto de partido. Aunque la alegría duró poco, con la quinta falta de equipo señalada sobre Yates, los visitantes volvían a apretar. Aunque, ahora, era turno para que Kalinicenko viera aro y mantuviera al CB Zamora Enamora por delante durante los mejores momentos visitantes (52-49, m. 28).

El cuadro local se intentó agarrar con uñas y dientes al partido pero, la dinámica del choque acabó por desembocar en la remontada "roja" pues a los locales les costó cada vez más anotar a diferencia de un Maderas Sorli Benicarló que, en bonus de faltas, lo tuvo más fácil para llegar por delante al parcial decisivo (54-56).

Yates hizo la primera del cuarto periodo pero el inicio del parcial decisivo arrancó con un intercambio de canastas que favorecía a los visitantes pues el tiempo pasaba y el marcador seguía siendo desfavorable para un CB Zamora Enamora algo irregular en la parcela ofensiva (58-59, m. 44). Un bajo porcentaje de acierto que compartió con el Maderas Sorli Benicarló, que pese a robar más balones y controlar el rebote, no logró distanciarse de forma notable, dejando el resultado en el aire a seis minutos del final (58-61).

El Ángel Nieto entró en ebullición en la recta final. El público trató de conectar con su equipo y llevarle hasta la victoria. Especialmente cuando Naspler puso un prometedor 60-61. La grada no aflojó nunca pero su energía no empujó al CB Zamora Enamora a dominar el rebote, gozando de demasiadas jugadas "extra" el bloque castellonense como para ceder en el luminoso.

Un parcial de 0-3 complicaba aún más la tarea pero Yates se las apañó para encontrar a Kalinicenko y volver a poner el partido en un puño, logrando el pívot el 63-64 justo antes de volver a acumular cinco faltas personales el cuadro zamorano. Un factor que se antojaba determinante a dos minutos del desenlace.

Los castellonenses, más agresivos y con faltas de sobra en la recámara, no fallaron en la recta final y controlaron el juego, pero se olvidaron de anotar. Eso que tan bien se le da a Kalinicenko, que puso el empate a 66 a falta de 11 segundos con un triple desde delante del banquillo visitante, obligado a parar el choque y tirar de pizarra. Una jugada que detuvo a tiempo el CB Zamora Enamora para jugarse el todo por el todo en Benicarló tras firmar el resultado más insual de todos, el empate.

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