Zamora muestra su unidad para luchar por un tren Ruta de la Plata del siglo XXI

El aguacero resta participación a una movilización que une a representantes de todos los partidos, colectivos ciudadanos y agentes sociales

Los manifestantes, resguardados de la lluvia en los soportales de la Subdelegación del Gobierno, en la plaza de la Constitución. | José Luis Fernández

Los manifestantes, resguardados de la lluvia en los soportales de la Subdelegación del Gobierno, en la plaza de la Constitución. | José Luis Fernández / Alberto Ferreras

Sin duda el aguacero restó participación a la movilización de este sábado por la reapertura del tren Ruta de la Plata, pero no pudo con el espíritu de unidad que ha concitado la reivindicación. Todos los partidos políticos junto a los máximos responsables del Ayuntamiento de Zamora y la Diputación Provincial y los principales agentes socioeconómicos de la provincia se manifestaron en una concentración que congregó a unas 250 personas en la plaza de la Constitución al mediodía, en el momento de la jornada en la que más intensamente llovió en la ciudad.

Una de las pancartas de la movilización.. | José Luis Fernández

Una de las pancartas de la movilización.. | José Luis Fernández / Alberto Ferreras

A la vez que en Zamora, otra quincena de ciudades del corredor ferroviario del Oeste, desde Gijón hasta Huelva y Cádiz, celebraron concentraciones que ponen de manifiesto la importancia que para el oeste español tiene esta infraestructura. La Asociación Ferroviaria Zamorana, convocante de la movilización en esta provincia, se mostró satisfecha de la respuesta y la falta de protagonismo político en una reivindicación que atañe a todos y que, según recordó su presidente, José Manuel Rodríguez, son las ciudades de la Ruta de la Plata en las que no se ha cerrado la vía las que más demandan los 340 kilómetros entre Plasencia (Cáceres) y Astorga (León). Ese tramo cerrado en el año 1985 es necesario reabrirlo para completar un eje de comunicación por tren que es clave para la vertebración del oeste español y que supondrá un aliciente económico y un potencial industrial para las provincias en las que ahora no hay servicio ferroviario de norte a sur, que coinciden con las del eje fronterizo con Portugal con mayores problemas de despoblación.

La importancia que tendría la reapertura para Zamora y para el asentamiento de nuevas industrias en la provincia también lo subrayó el presidente de la Cámara de Comercio e Industria, institución que lleva años reivindicando esa infraestructura ferroviaria.

Opiniones

Opiniones / LOZ

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Opiniones / LOZ

La reapertura, según se expuso en la concentración, debe realizarse con arreglo a los parámetros de un tren del siglo XXI en cuanto a seguridad y velocidad, de ahí que se pretenda desterrar la imagen "decimonónica" que puede sugerir referirse a esa vía como la de la Ruta de la Plata, un tren que funcionó entre los años sesenta y ochenta del siglo pasado, y en vez de ello se prefiera utilizar la expresión de Corredor Ferroviario del Oeste, según apuntaron los convocantes. Otro aspecto clave es el del horizonte temporal, ya que el año 2050 es demasiado tiempo y los impulsores de la reapertura quieren que, como muy tarde, en el año 2040 se pueda ir directo en tren de Zamora a León y Asturias en dirección norte, y a Salamanca, Plasencia, Cáceres, Mérida, Sevilla, Cádiz o Huelva si se viaja hacia el sur.

La comparación con el corredor mediterráneo asomó entre los manifestantes y al igual que en el levante existe un ferrocarril que vertebra ese territorio se intenta que el oeste español tenga, aprovechando los fondos europeos disponibles, un medio de transporte sostenible y generador de riqueza. Se trata, en definitiva, de poder subirse al tren de la Ruta de la Plata como el del futuro industrial de Zamora.

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