"Espantada" de tres cofradías de Zamora en la asamblea de la Junta pro Semana Santa
El obispo reprocha a las hermandades la "deslealtad institucional"
C. G.
Bajan turbias las aguas de la Junta pro Semana Santa, que celebró este lunes su asamblea anual con la ausencia de tres hermandades, de la Buena Muerte, Vera Cruz y Santo Entierro mientras otras dos rehusaban dar su apoyo a las cuentas y el presupuesto y otra mas, Yacente, que votó a favor, hacía un llamamiento a un cambio de rumbo. Al final la directiva que preside Isabel García Prieto salvó los muebles al aprobar cuentas de 2023 y presupuesto de 2024 con holgura (57 votos contra diez), pero se evidenció que hay marejada de fondo.
Pasó lista Rufo Martínez de Paz en el salón de actos del Seminario de San Atilano y se echó en falta a quince representantes de las cofradías díscolas, de Buena Muerte, Santo Entierro y Vera Cruz, en la asamblea general de la Junta pro Semana Santa de Zamora. Un comportamiento que provocó la reacción del obispo, Fernando Valera, quien habló directamente de «deslealtad institucional» de las hermandades que optaron por no hacer acto de presencia en el principal órgano de la Junta de cofradías, sin importarles la asistencia de las autoridades y sin tener el valor de manifestar su desacuerdo a la cara.
Hubo otras cofradías que sí asistieron, pero que no votaron las cuentas. En la liquidación de 2023 Vía Crucis votaba negativamente y Tercera Caída se abstenía y en la votación del presupuesto 2024 ambas hermandades optaban por la abstención.
El margen de la directiva para sacar las cuentas adelante fue amplio, 57 contra 10, pero hubo otro factor que avala la tesis de que puede haber cierta quiebra en la Junta de cofradías. Uno de los representantes del Yacente, cofradía que votó a favor, advirtió de la necesidad de un cambio de rumbo, ya que un déficit de 40.000 euros como el aparecido en 2023 es sencillamente «insostenible».
Habló también Isabel García de «unidad» y cargó contra las «insidias» en su balance de gestión. Aunque también habló que ha pedido un aumento del apoyo a las instituciones con el fin de que la Junta de Cofradías pueda hacer frente a su día a día en estas especiales y difíciles circunstancias.
Y habló la representante de la Junta, la jefa de Cultura, Pilar Alonso de que la situación del nuevo Museo, ya en fase de preparación de los pliegos para volver a licitar la obra y con el problema del derribo pendiente aún por resolver.
Y lo hizo el subdelegado del Gobierno, Ángel Blanco, para poner negro sobre blanco las dificultades del apoyo del Ministerio de Cultura a un Museo privado y provincial, aunque no se rinde, y seguirá en el empeño.
Por si acaso Isabel García ya está moviendo los hilos para asegurar financiación para el proyecto de Musealización y este mismo martes tiene cita con la viceconsejera de Cultura, Mar Sancho, para empezar a hablar del asunto.
El obispo hizo otro anuncio importante, la creación de una oficina de rendición de cuentas que obligará a las cofradías a un esfuerzo extra de transparencia en la gestión.
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