Zamora camina hacia uno de sus días más tórridos desde que hay datos

La ola de calor ya golpea a Zamora. El domingo, las temperaturas rozaron los 39 grados y, este lunes, los termómetros incluso superaron esa marca, con valores de 39,1 en la capital. Esa circunstancia, unida al hecho de que las mínimas no bajaron de los 20 grados, está generando una cierta sensación de agobio, principalmente en el núcleo urbano, donde siempre se intensifica la percepción de ambiente irrespirable.

Eso, en lo que concierne a lo ya superado, pero es que lo peor todavía está por venir. Este martes, la provincia estará en alerta naranja por temperaturas muy elevadas que podrían superar los 40 grados durante varias fases de la tarde, un preludio de lo que ocurrirá el miércoles, cuando se prevé que se alcance el pico de calor de esta ola y que Zamora registre uno de los días más tórridos desde que hay datos oficiales.

Falta de respiro

Si esas previsiones se cumplen, las máximas de este 23 de agosto podrían oscilar entre los 41 y los 42 grados, mientras que las mínimas no bajarían en ningún caso de los 24 en Zamora capital, lo que incidiría en esa sensación de falta de respiro, incluso en las horas donde habitualmente refresca.

Hay que recordar que la máxima histórica registrada en la provincia se apuntó en julio del año pasado. Concretamente, el día 14, cuando los termómetros marcaron 41,8 grados. La Aemet considera que los valores de este miércoles podrían rondar ese dato, lo que implicaría que Zamora rebasaría la temperatura más alta jamás vista por estos lares en un mes de agosto. En ese valor extremo mensual, la cifra más elevada data del año 2018, cuando el día 6 los valores se elevaron hasta los 40,4 grados. Ese record está ahora amenazado.