Guarido envía la obra del Mercado de Abastos de Zamora a contratación por seis millones

La rehabilitación del centenario centro comercial contempla estructurar 35 nuevos puestos, un bar y un altillo para actividades de promoción

Recreación del interior del Mercado de Abastos tras la rehabilitación.

Recreación del interior del Mercado de Abastos tras la rehabilitación. / Proyecto

Luis Garrido

Luis Garrido

El Ayuntamiento de Zamora invertirá seis millones de euros en el proyecto de rehabilitación del Mercado de Abastos, cuyas obras podrán comenzar en el año 2023 después de que la Junta de Gobierno Local haya aprobado este pasado martes el expediente definitivo de su contratación. La intervención servirá para ejecutar la necesaria reforma del inmueble, así como para adecuar el entorno con una reestructuración absoluta de los elementos urbanos y también del tráfico. La actuación será financiada con fondos propios, después de que su dosier se estrellara una y otra vez contra la puerta cerrada de la convocatoria del 1,5% cultural. Tras varios años de espera, la administración local ha decidido finalmente tirar hacia adelante haciendo uso de la caja común para que la capital cuente por fin con una plaza de abastos histórica, pero adaptada al siglo XXI.

La renovación del Mercado de Abastos, bajo el proyecto de Porfirio Domínguez y Fernando Girón, contempla una estructura de 24 puestos comerciales en la parte superior y otros once en la planta baja, donde se ubicarán las instalaciones complementarias y los espacios de almacenamiento y servicios del edificio. Asimismo, el inmueble contará con un bar interior y, como principal novedad, se habilitará un altillo en la planta superior donde se puedan realizar presentaciones, cursos y otro tipo de eventos relacionados con la actividad gastronómica.

La rehabilitación está ideada dentro del contexto urbano propio del entorno, desde el punto de vista del comercio cercano y acorde con las características de lo que se comienza a considerar el Casco Histórico. En su exterior, se reorganizará toda la circulación y el acceso de camiones se realizará por la zona más próxima a la calle Traviesa. Los aparcamientos desaparecerán y también la circulación alrededor del edificio, de manera que quede un espacio peatonal que revitalice el entorno.

La plaza del Mercado tras la reordenación. | Proyecto

La plaza del Mercado tras la reordenación. | Proyecto / Luis Garrido

Junto a todo esto, se plantea una modernización total de la funcionalidad del actual Mercado de Abastos. Esto incluye mejoras en materia de refrigeración, iluminación, accesos, baños y vestuarios. Los puestos laterales se mantendrán con el espíritu de los actuales, mientras que en el centro del edificio se plantea colocar puestos más bajos para alimentos de temporada. Una concepción que aspira a seguir siendo el centro neurálgico del comercio tradicional en la ciudad de Zamora, pero con una serie de servicios adaptados a los nuevos tiempos que conviertan al emblemático edificio de Segundo Viloria en un espacio moderno y digno de visita.

El presupuesto de licitación del contrato de obras saldrá por seis millones de euros. Se trata de un millón más de lo inicialmente previsto por la administración local. Hasta la fecha, el Ayuntamiento de Zamora ha conseguido una inyección económica de 1,1 millones de euros por parte de la Junta de Castilla y León, que se traduce en aproximadamente un 20% del total del dinero necesario. Habrá que esperar todavía si el Gobierno de España colabora de alguna forma.

Mientras se ejecuta la obra, cuyo plazo de realización está estimado en algo más de un año, los comerciantes se trasladarán a un mercado provisional que se situará en la calle de Santiago Alba Bonifaz, en el entorno del parque de La Marina. Allí se habilitará una carpa de 55 metros de largo por 15 de ancho debidamente acondicionada para el desarrollo de la actividad que dará cobijo a una treintena de puestos. Solo esta solución costará 1,1 millones de euros y la previsión es que pueda comenzar a funcionar mediado el año 2023, probablemente pasadas las elecciones municipales del mes de mayo. Durante ese tiempo deberá avanzar el proceso de contratación de la obra y conseguir así que no exista paralización de la actividad.