CRÓNICA | Balonmano Zamora - Handbol Sant Quirtze: Importante y agónica victoria para seguir en la lucha

El Balonmano Zamora Enamora firmó una victoria tan importante como agónica ante el colista de su grupo, el Sant Quirze, que resistió hasta el final en un Ángel Nieto que explotó de alegría con el definitivo 30-29 de Etayo a cuatro segundos del término del encuentro. Un duelo en el que los pistacho no rindieron a su mejor nivel y que el arbitraje también complicó por momentos, dando a los visitantes ocasión de luchar por dar la sorpresa y sumar sus primeros puntos.

Para el Balonmano Zamora era imperativo ganar y quizá esa presión por sumar los dos puntos afectó a su rendimiento al inicio del partido. Sus dos primeros lanzamientos no fueron efectivos y Sant Quirze se adelantó en el marcador. Aunque, los nervios, en caso de haberlos, comenzaron a disiparse cuando Jaime anotó el 1-1 al contragolpe.

El tanto calmó los nervios pero no alteró el guion de los primeros compases, marcados por defensas muy férreas y ataques poco certeros. Solo Anderson Silva logró anotar de nuevo antes del minuto 5, poniendo en ventaja a un Balonmano Zamora Enamora que agrandaría diferencias en los siguientes compases.

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Pasados los minutos de tanteo, los dos equipos trataron de apretar el acelerador. Primero los locales, con dos contragolpes que Jaime, con una rosca, y Cubillas, culminaron para poner el 4-1. Y después, los catalanes, con su segundo tanto. Un intercambio de golpes que alargó Anderson Silva y siguió con el 5-3 con el que se alcanzaron los diez minutos de partido.

Illesca devolvió la renta de tres goles para un cuadro pistacho que se mostraba muy sólido atrás pero que no acababa de sacar provecho de los múltiples errores visitantes. Con todo, y antes de que Fran González moviera el banquillo, la renta subió a cuatro tantos con un Anderson Silva pletórico que daba aún más tranquilidad a los suyos con su cuarto tanto desde los nueve metros (9-4, m. 13).El brasileño se erigió como el gran arma ofensiva de los pistacho, pero ni su quinta diana evitó que el partido se complicara para los de Fran González.

Antes de la recta final del primer acto, el Balonmano Zamora Enamora bajó su rendimiento defensivo y eso permitió a Sant Quirze, junto a un par de paradas de su portero, recortar diferencias en el marcador hasta situarse a dos goles justo antes de que Jaime rompiera la sequía anotadora local desde los siete metros (11-8, m. 18). Un tanto que aliviaba la presión frente a un colista que iba a darlo todo por sumar sus primeros puntos.

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La situación, complicada, se hizo aún más difícil cuando en el minuto 20 Fernando veía la primera exclusión del partido. Una inferioridad que sumada a un regalo pistacho igualó terriblemente el tanteo (11-10), si bien apareció Claudio Carneiro con su primera diana de la mañana para dar aire a los suyos. Un respiro que duró poco y llevó a González a introducir numerosos cambios en pista. Relevos que no impidieron, en primera instancia, que el partido volviera al punto inicial con el 12-12 que figuraba en el tanteo a cinco minutos del descanso.

Guille rompió con el nuevo mal parcial pistacho pero, lejos del dominio del inicio, el cuadro de Viriato sufría para mandar. Aun así, con un siete metros de Jaime y una rápida contra en los últimos segundos, los locales alcanzaron el descanso con 15-13 a su favor. Una renta que pudo ser mayor si los árbitros, a lo largo del primer tiempo, hubieran castigado a los visitantes determinadas y peligrosas acciones que quedaron impunes.

El criterio arbitral quedó descubierto al inicio del segundo periodo. Tras un gran gol de Sant Quirtze, la defensa rival golpeó a Illesca sin señalarse absolutamente nada, dando lugar a una contra en la que Guille era excluido y los catalanes firmaban el empate desde los siete metros.

Con uno menos, la cosa no hizo más que empeorar. Una pérdida de balón ponía por segunda vez en el partido a los visitantes por delante y el Balonmano Zamora Enamora pasaba a intentar no perder comba con un rival crecido que en defensa gozaba de la permisividad suficiente para recuperar balones con sencillez. El duelo pasó a ser un correcalles plagado de nervios al que los locales se subieron gracias a las paradas de Doval y algún gran tanto como el 18-17 de Elola. Un guion muy alejado del que interesaba a los pupilos de Fran González, que seguían pagando muy caros sus errores.

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Un parcial de 0-2 y un tanto de Guille devolvían la igualdad en el marcador, dando lugar a una alternancia de goles. Y pese a las paradas en meta zamorana o las grandes acciones de Claudio Carneiro, eran los visitantes los que llevaban la voz cantante entre empate y empate. Pero el último fichaje pistacho no iba a conformarse con ello y con un gol para enmarcar ponía el 22-21 antes del último cuarto de hora de partido.

El angoleño asistió a Bellia para alargar el primer gran parcial pistacho del segundo acto a 0-3, si bien la alegría duró poco pues Horcajaada era excluido por dar el balón con el pie e Illesca fallaba un balón claro en seis metros. Fallos que Sant Quirze no desaprovechó para empatar de nuevo la contienda. Hasta el siguiente tanto de Cubi, desde los siete metros, entró con suspense para poner más de los nervios a una afición inconforme con los suyos y el arbitraje.

El duelo ese encaminaba a su desenlace y aparecieron tanto Mach como Claudio Carneiro para aportar calma al bloque pistacho, en el que Fran González daba también entrada a Silva. El central hizo el 25-23 que forzó el tiempo muerto visitante pero, cuando buscó ser asistente, falló sus dos pases y propició la remontada de un Sant Quirze que se puso por delante con un parcial de 0-3 que obligó a detener el partido al entrenador local.

Un final de locura

Del asueto, con siete minutos por delante, se volvió con un acierto de Cubillas desde los siete metros para hacer el 26-26. Y si bien los zamoranos fallaron su primera ocasión para ponerse por delante y su rival volvió a ponerse por delante, a falta de cinco minutos el colista se quedaba por primera vez con un hombre menos.

Etayo anotó pero, acto seguido, el farolillo rojo anotó por partida doble para poner contra las cuerdas a los locales que reaccionaron con un gol de Jaime cuando se recuperó la igualdad de efectivos en pista, situando el extremo el 29-29 a falta de dos minutos para compensar un error previo y dar máxima emoción al desenlace.

Sant Quirtze tuvo balón para adelantarse pero falló y el Balonmano Zamora Enamora pasó a atacar la meta rival sin éxito durante los siguiente segundos, llevando a Fran González a pedir tiempo muerto a falta de 28 segundos para buscar solución al problema y encontrar el tanto de la victoria. Y si bien, a la primera no salió, pues los catalanes frenaron la jugada con falta, sí a la segunda con una incursión de Cubillas que acabó dejando solo a Etayo en los seis metros para marcar el gol de la victoria. Un triunfo por 30-29 que mantiene en la pelea por la salvación a los zamoranos y hunde a su rival a Primera Nacional.

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