222 nombres de Vigo de Sanabria y una canción anónima

El profesor Francisco Gallego presenta su investigación sobre vecinos del pueblo desde el siglo XIX hasta bien entrado el XX

Conferencia de Francisco Gallego en Vigo de Sanabria. | Araceli Saavedra

Conferencia de Francisco Gallego en Vigo de Sanabria. | Araceli Saavedra / Araceli Saavedra

Francisco "Paco" Gallego Estrada puso a cantar a todo su auditorio en el transcurso de su conferencia "222 historias documentadas de personas y hechos ocurridos en Vigo en los últimos 150 años".

El profesor e historiador repasó desde el siglo XIX hasta bien entrado el siglo XX a través de nombres de las generaciones anteriores como protagonistas puntuales del momento histórico, desde reclutamientos en Vigo de Sanabria y Cuba, nombramientos de médicos, de profesores, de cartero peón. Nombres propios recogidos por el investigador en hemerotecas, archivos, publicaciones oficiales, edictos.

Con especial delicadeza nominó a los perseguidos en la Guerra Civil, los dirigentes del movimiento obrero de Vigo, uno de los pocos pueblos que se opuso al alzamiento. Sin juzgar y sin posicionarse pero describiendo los hechos acontecidos.

222 nombres y una canción

222 nombres y una canción / Araceli Saavedra

Y antes que la Guerra hubo otro hecho importante, la construcción de la carretera en 1929 que entonces se denominó la carretera de la estación de Puebla a la estación de Sobradelo con su relación de fincas expropiadas en Vigo y San Martín de Castañeda aunque al llegar la República las obras se pararon y ahí quedaron como si fuera un mirador turístico. En cuanto al calificativo de carretera, se quedó en camino de piedras y tierra prensada.

Y otro dato sobre estas obras es que las mujeres del pueblo trabajaron acarreando la piedra en cestos para la carretera. El primer presidente del Gobierno que pisó Vigo fue el general Primo de Rivera, como así se recogía en una pancarta de bienvenida colocada en Galende, que inauguró lo que se había hecho de carretera. Y otras 220 historias más, como aquel que se mató al lobo con una hoz y la canción compuesta en los años 50 para el vecino anónimo de Vigo que resultó herido al desprenderse el telesilla de las obras de la presa, y que cantaron a la de tres todos los vecinos que asistieron a la conferencia. Todo un libro de historia e historias.

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