Batacazo del turismo rural de Zamora en julio

No ha arrancado nada bien el verano para el turismo rural de Zamora. Los datos que acaba de publicar el Instituto Nacional de Estadística arrojan un descenso del 14.7% en número de viajeros y del 21.1 en pernoctaciones. Las casas rurales han perdido una de cada cinco noches este julio con respecto al pasado año.

Fueron 7.207 los viajeros que se alojaron en las casas rurales el julio, que son 1.224 menos que en el mismo mes del pasado año. Cayó tanto el turismo nacional, que pasó de 7.808 a 6.771 turistas como el extranjero, que bajó de 647 a 436 personas y se mantiene como un segmento casi testimonial en Zamora.

El turismo nacional salva el inicio del verano en Zamora

En pernoctaciones fue todavía peor la cosa, ya que pasaron de las 20.263 de julio de 2022 a 15.994 el pasado mes. El turismo nacional dejó 15.106 pernoctaciones en alojamientos de turismo rural, frene a las 18.948 del pasado año, mientras el extranjero durmió apenas 888 noches, frente a las 1.315 de hace un año.

Con estos datos el turismo rural de este 2023 experimenta de momento un retroceso del 6,3%, con 33.228 viajeros, 2.258 menos que el año anterior. Y entre enero y julio las pernoctaciones bajan un 6,7%, con 68.692 pernoctaciones, que son 5.005 menos.

Por parte, Castilla y León consolidó el pasado mes de julio el liderato en el ranking de personas que optaron por el turismo rural en España, al registrar 84.447 viajeros, superando a las Islas Baleares, que se sitúan en el segundo lugar con 62.517 desbancando a Cataluña, según el informe publicado hoy el Instituto Nacional de Estadística y recogido por Ical.

Todo ello, pese a haber anotado un descenso del 3,86% en la tasa interanual. En el conjunto de España, el volumen de viajeros alcanzó los 562.186, lo que supone un descenso del 1,2%, y de los visitantes que llegaron a Castilla y León, 74.573 eran residentes en España y el resto (9.884), arribaron procedentes del extranjero.

En cuanto a las pernoctaciones, también contabilizaron retrocesos de un 3,62% hasta las 231.211, y el 89,4% de las pernoctaciones contabilizadas en la comunidad fueron protagonizadas por turistas españoles, y el 10,6% restante, por extranjeros.

En Castilla y León la estancia media en alojamientos de turismo rural fue de 2,64 días, por debajo de los 3,11 registrados en el conjunto de España, y a lo largo del mes de julio permanecieron abiertos 3.520 establecimientos que ofertaban un total de 32.648 plazas, y empleaban a 5.203 personas. La ocupación media por plaza fue del 21,96 por ciento, porcentaje que los fines de semana se incremento al 37,20 por ciento, mientras que la media nacional se situó en 31,31 y 43,02% respectivamente.

Reparto provincial

Por provincias se observa que no sólo ha sido Zamora la que ha perdido fuelle este verano con el turismo rural. El mayor incremento de viajeros se contabilizó en Burgos, con un 32% más que un año atrás (16.658 en total), seguida por Valladolid con un 11,65% (4.620), Soria con un 8,25% (6.865) y Palencia con un 7,67% (6.220). Por el contrario, la mayor caída tuvo lugar en Ávila, con un 25,46% de descenso (11.958), seguida por Segovia con un 19,14% menos (9.408), Zamora con un 14,52% (7.207), Salamanca con un descenso del 6,71% ()8.312) y León con un 5,37% (13.199).

En cuanto a las pernoctaciones, Burgos registró un aumento del 17,11% (con 36.646 en total), seguida por Palencia con un 8,41 por ciento (16.760), León con un 8,05 por ciento (39.160), Valladolid con un 6,79 por ciento (10.776) y Soria con un 5,7% (22.782). En el extremo opuesto, descendieron un 46,17% en Segovia (19.100), un 21,1% en Zamora (15.994), un 19,42% en Ávila (37.949) y un 2,05% en Salamanca (23.959) .