Los hijos de la duquesa roja intentarán alcanzar un acuerdo con su hermana sobre la herencia de su padre

“Quiero que todo acabe para descansar”, ha admitido Rosario Bermudo

Rosario Bermudo junto a su abogado atiende a los medios momentos antes de entrar en la Audiencia Provincial

Rosario Bermudo junto a su abogado atiende a los medios momentos antes de entrar en la Audiencia Provincial / Concha Ortega - Ical

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Los hijos de la duquesa roja intentarán llegar a un acuerdo respecto a la herencia de su padre, José Leoncio González de Gregorio, con Rosario Bermudo, que luchó más de una década para ser reconocida con hija legítima, lo que llevó a exhumar el cuerpo de su progenitor y a someterle a pruebas de ADN.

El Juzgado de Instrucción número 2 de Soria acogió hoy la vista técnica sobre la reclamación de la legítima que corresponde a Rosario Bermudo. Los abogados de ambas partes, a petición de la jueza del Juzgado número 2 de Soria, tomaron a bien llegar a un acuerdo sobre la herencia que recibirá Rosario, que oscila entre 1,2 y 2 millones de euros.

El abogado de Rosario Bermudo, Fernando Osuna, indicó a Ical que de no llegar a un acuerdo entre las partes el juicio está fijado para el 9 de octubre a las 10.00 de la mañana, y agregó que la disposición por ambas partes es “buena”, porque se han tenido en cuenta las dificultades que conlleva hacer efectivo los bienes muebles y rústicos.

La jueza ha abierto la posibilidad de llegar a un acuerdo y no tiene por qué heredar todo lo que le corresponde en metálico. Cabe la posibilidad de su participación en bienes patrimoniales como pisos en Madrid, fincas rústicas y en el Palacio de Quintana Redonda, propiedad de Pilar Medina Sidonia que fue la heredada universal de la herencia de su padre”, explicó el abogado tras lo cual aclaró que Pilar fue “mejorada” en la herencia con respecto a sus otros tres hermanos.

"Olvidar rencillas"

En la vista técnica también participó el hermanastro de Rosario, Gabriel González de Gregorio, quien aludió a la necesidad de “olvidar las rencillas y dar ejemplo de que las cosas se pueden arreglar sin pleitos”, y alentó a sus otros hermanos, Leoncio, Pilar y Javier a que se avengan a llegar a un acuerdo, antes de juicio, que respete los mínimos de su hermana Rosario.

"Tan poco se puede pedir mucho a mis hermanos porque nosotros de nuestra madre no hemos recibido nada, cosa que también es sorprendente y nos ha costado muchos juicios”, recalcó, seguidamente, para considerar que existen muchas lagunas en la legislación respecto al derecho de sucesiones.

Por su parte, Rosario avanzó que mañana acudirá al Registro Civil para cambiar su apellido, y significó que lleva media vida luchando para que se reconozcan sus derechos como hija del aristócrata. “Quiero que todo acabe para descansar”, admitió.

La hijastra de la Duquesa Roja e hija de Leoncio González al 99 por ciento, según las pruebas de paternidad, a través del ADN, realizadas tras la exhumación del padre en el cementerio de Quintana Redonda, señaló que fue su abogado el que la impulsó a seguir adelante, primero con el reconocimiento de quién fue su padre y después con la legítima que le corresponde según la ley.

Asimismo, relató que siempre supo quién era su padre y que su madre, debido a los escasos medios económicos, tuvo que dejarla en Écija por no dejarla en una inclusa.

Rosario Muñoz Centeno, madre de Rosario Bermudo trabajó en una casa acomodada en los años 50, en este caso en la finca que la familia González de Gregorio poseía en Valencia de las Torres, y fue despedida cuando se descubrió que está embarazada del hijo de los dueños. 

El abogado de Rosario señaló que es “incontestable” que ella es hija legítima y, por tanto, se debe llegar a un acuerdo, puesto que, además “las costas del juicio pueden ser muy altas”. “Si estamos hablando de un litigio donde como mínimo hay un 1,2 millones de euros, lo que cuesta el abogado y el procurador se puede poner, en el caso más favorable a los hermanos de Rosario, en 125.000 euros de costas, en primera instancia. Si vamos a la Audiencia Provincial y al Tribunal Supremo, esto en costas puede ser una cantidad mucho mayor. Y este factor deben tenerlo en cuenta a la hora de negociar".

Asimismo, insistió en la necesidad de “dejar orgullos y cuestiones personales" de lado, y recordó que el derecho que asiste a Rosario data de la época de los romanos, siglo II o siglo III, cuando se estableció la legítima de los hijos, de los herederos forzosos.