Teletrabajar en el pueblo zamorano de dos habitantes

Letrillas, en la Sierra de la Cabrera, y otras ocho localidades que cuentan sus vecinos con los dedos de las manos aspiran a ganar población con la baza del internet ultraveloz

Instalación de la fibra óptica en el medio rural por parte de trabajadores de la operadora Adamo. | Cedida

Instalación de la fibra óptica en el medio rural por parte de trabajadores de la operadora Adamo. | Cedida / Alberto Ferreras

A muchos zamoranos ni siquiera les sonará su nombre, aunque en La Carballeda saben bien dónde está Letrillas, pese a que sea un pueblo paradigma de la despoblación y sus dos únicos habitantes censados no auguren mucho futuro a esta localidad perteneciente al Ayuntamiento de Espadañedo.

Ahora, al menos, pueden captar teletrabajadores que quieran huir de las ciudades para asentarse en una aldea idílica por la paz, tranquilidad y armonía con la naturaleza que se respira.

Pese a ofrecer un aspecto auténticamente rural, en Letrillas se codean con madrileños, barceloneses o valencianos –por poner solo tres ejemplos de grandes urbes españolas– en cuanto a velocidad de internet. Hasta mil megabytes por segundo de ancho de banda, una cifra "top" calificada de "ultrarrápida" es la que ya tienen a su disposición los dos vecinos de Letrillas y todo el que quiera llegar como nuevo morador al pueblo. También se admiten nómadas digitales y teletrabajadores incluso de las antípodas, porque la conexión ultraveloz de este pequeño pueblo carballés no tiene nada que envidiar a la de Sídney, pese a que en un caso solo sean dos habitantes los que la disfruten y en el otro lleguen a seis millones y medio.

Disipadas las barreras digitales, Letrillas es el caso más paradigmático pero no el único de las consecuencias positivas del plan de despliegue de la banda ancha en el medio rural que ha puesto en marcha el Gobierno de España con fondos europeos en colaboración con operadores de telefonía e internet.

Sanabria, Sayago, Aliste o La Carballeda ven mejoradas sus conexiones a internet

El último listado facilitado por la compañía Adamo como encargada de extender la red de fibra óptica en la provincia incluye otras ocho aldeas que pueden contar sus habitantes con los dedos de las manos y ya tienen internet ultrarrápido. Es el caso de Valleluengo (Ayuntamiento de Rionegro del Puente), Villarino de Cebal (en San Vitero) y Monterrubio (en Rosinos de la Requejada), con cinco habitantes cada una; Utrera de la Encomienda (en Espadañedo) y Dornillas (en Manzanal de los Infantes), con siete; Las Enillas y Cernecina, con nueve y pertenecientes ambas al Ayuntamiento de Pereruela; y Linarejos, en Manzanal de Arriba, con diez vecinos.

Visita del obispo de Astorga al cementerio de Letrillas. | A. S. (Archivo)

Visita del obispo de Astorga al cementerio de Letrillas. | A. S. (Archivo) / Alberto Ferreras

El listado sigue con otras 18 localidades de la provincia de menos de medio centenar de habitantes en las que también se ha instalado la fibra óptica con velocidades que, además de teletrabajar, permiten ver una película en calidad 4K o ultra HD, disfrutar de videojuegos en línea en máxima resolución, mantener reuniones por videoconferencia o asistir a clases a distancia sin problemas de conexión.

En algunos casos esa conexión de fibra es la única posibilidad de hablar por el teléfono móvil, como le pasa al alcalde de Espadañedo, Filiberto Álvarez, que está al frente del ayuntamiento al que pertenece Letrillas. El regidor subraya que internet ultraveloz no sólo beneficia a los dos vecinos que están censados y viven todo el año en esa pedanía, sino que también lo disfrutarán los numerosos veraneantes que regresan a éste y otros pueblos de la zona azotados por la emigración.

Si no fuera por la fibra óptica yo estaría incomunicado

Filiberto Álvarez

— Alcalde de Espadañedo

El alcalde reside en Vega del Castillo, otro anejo de Espadañedo de tan solo catorce habitantes en el que la fibra óptica desembarcó hace un año. Eso le permite contestar llamadas telefónicas, ya que en su pueblo no tiene cobertura de telefonía móvil y únicamente puede comunicarse a través del wifi de su casa utilizando para las llamadas aplicaciones de mensajería instantánea como Whatsapp. "Si no fuera por la fibra yo estaría incomunicado", reconoce. En su núcleo de población, aunque son 14 los censados, los enganches a internet suman ya 19 de fibra óptica y otros siete que utilizan aún la alternativa anterior de conectarse a la red a alta velocidad vía satélite, con una antena parabólica, según enumera.

Videoconferencias, películas en 4K, educación a distancia o juegos en línea, algunas de las ventajas del internet ultrarrápido

De hecho, en verano su pueblo también cobra vida como demuestra el hecho de que tengan sesenta contadores de agua en activo y en agosto haya cincuenta casas abiertas, con unos cuatro vecinos por vivienda de media. Todos ellos también pueden acceder al internet veloz. Eso sí, el regidor pone algún pero al proceso de extensión de la fibra óptica en el municipio. En Carbajales de la Encomienda, el cable se ha quedado lejos de la vivienda de una pareja joven que necesita internet y en otros anejos la opción de cableado no es la deseada al no ir soterrado, aunque a Filiberto Álvarez no le queda más remedio que aceptarla porque el proyecto viene del anterior mandato, cuando no era alcalde. Pese a todo, admite la importancia de que pequeñas localidades puedan tener mil megas de velocidad. Se pueden codear así con Madrid o Berlín en internet veloz. Ahora solo falta la llegada de nuevos pobladores con ese reclamo.

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