Hermandad Penitencial del Espíritu Santo: 49 años de "palomos"

De cuentas, cronologías y aniversarios

Cartel con la Hermandad del Espíritu Santo.

Cartel con la Hermandad del Espíritu Santo. / Rubén Sánchez Domínguez

Rubén Sánchez Domínguez

Rubén Sánchez Domínguez

El 12 de diciembre de 1974, Antonio Briva Miravent, obispo de Astorga, y administrador apostólico de la sede vacante de Zamora, firmaba el decreto de constitución canónica de la Hermandad Penitencial del Smo. Cristo del Espíritu Santo (y la del Smo. Cristo de la Buena Muerte), por lo que el pasado 12 diciembre, cumplimos cuarenta y nueve años de vida.

Nuestra hermandad tiene una cronología compleja que está generando ciertas confusiones, y que esperamos aclarar con este escrito. Cuando la cofradía hace su primera procesión, el Viernes de Dolores, 21 de marzo de 1975, la cofradía apenas tenía cuatro meses de vida, por lo que el número de procesiones siempre antecede al de años cumplidos. Así pues, hoy debería celebrarse la quincuagésima procesión, ocho meses antes de cumplir el 50 Aniversario el próximo 12 de diciembre. Sin embargo, y debido a que las restricciones impuestas por la pandemia de la COVID-19, impidieron su desarrollo en 2020 y en 2021, no será así, y la quincuagésima procesión no se efectuará, Dios mediante, hasta el 2026.

Ahora bien, este año la hermandad sí celebra una efeméride importante, ya que proclamará, por quincuagésima vez, un Viernes de Dolores, el Evangelio de la Pasión del Señor. A pesar de que no hubo procesión en los años de la pandemia sí se desarrolló este rito (en 2020 a puerta cerrada y en 2021 con aforo limitado), emitiéndose a través de medios digitales. No era la primera vez que el acto no se hacía en el atrio en la historia de la hermandad. En 1991, unas obras de rehabilitación del espacio impidieron realizarlo en su interior, desarrollándose en la plaza de la Catedral. Allí permaneció hasta 1995, momento en el que regresa al ágora del templo. Asimismo, en 2010, esta vez a causa de las obras de rehabilitación de la parroquia dentro del programa "Zamora Románica", la procesión salió de la Catedral, haciendo el recorrido inverso y celebrando el acto en la plaza del Espíritu Santo.

Así pues, y con motivo de alcanzar esta efeméride, esta noche la Hermandad hará Estación de Penitencia ante el Santísimo Sacramento en el interior de la Catedral del Salvador, al igual que ya hizo, en 2016, con motivo del Año Santo Jubilar de la Misericordia. En aquella ocasión el cortejo atravesó la Puerta Santa junto al Sr. Obispo, y Capellán de Honor de la hermandad, el Deán y los Canónigos, que recibieron a la cofradía junto a la misma. Se hizo estación al pasar por la Capilla Sacramental y una oración ante la imagen del Cristo de las Injurias, elegido en aquella ocasión, imagen de referencia jubilar. Este año se rezará una ante la imagen de Ntra. Sra. de la Majestad, conocida popularmente como "Virgen de la Calva", en recuerdo de los Dolores de María, cuya memoria, se celebraba este Viernes, antes de la reforma litúrgica derivada del Concilio Vaticano II.

Una vez finalizada la estación continuará el acto de Proclamación de la Pasión en el atrio como viene siendo habitual, y terminando con el cántico "Christus factus est", obra de Miguel Manzano Alonso (1979), y cuyo texto, tomado de un fragmento de la Carta del Apóstol San Pablo a los Filipenses, nos recuerda la naturaleza humana de Dios que se entrega para la salvación del hombre.

Además de la estación en el interior de la Catedral, algunas acciones refuerzan esta efeméride. Una de ellas la intervención curativa de la imagen del Cristo por Gerardo Casaseca, en el marco del convenio entre la Junta Pro Semana Santa y el Centro de Conservación y Restauración de Bienes Culturales de Castilla y León (CCRBC), de la Junta de Castilla y León. La imagen se encontraba en un buen estado estructural, pero era necesario intervenirla para paliar pequeños deterioros detectados en la imagen en los controles que parroquia y hermandad realizamos a lo largo del año. La intervención ha consistido en una limpieza de policromías, reintegración cromática de lagunas, restitución de cinco clavos en la corona y la aplicación de una base protectora.

Otra la realización de un mural de la hermandad, obra del artista toresano Carlos Adeva, en el muro sur de la Casa Parroquial del Espíritu Santo, en la calle que conecta la parte baja del barrio con la de San Isidro y Obelisco. La obra plasma la cabecera de nuestra procesión, en una interpretación libre de una fotografía de Pablo Peláez. Centra la composición la Cruz Guía que la abre nuestra procesión del Viernes de Dolores desde 1978, obra de del tallista Julián Román Gonzalo "Alito", y donada por la familia Alonso. Pese a su cronología, relativamente reciente, se trata de una de las piezas más singulares y brillantes de la artesanía aplicada a la Semana Santa, y que en la procesión del Viernes de Dolores pasa un tanto desapercibida. El mural constituye un nuevo marcador identitario en un barrio en el que nos sentimos plenamente integrados.

Iniciamos esta Semana Santa, como hace 49 años: siendo el pórtico de la Pasión de Zamora, el anuncio de lo que estaba escrito. Y en la espera de llegar a nuestro particular jubileo, que celebraremos a partir de diciembre y durante todo el año 2025. Han sido casi cinco décadas de comunidad con un barrio que nos acogió –y nos acoge-, con cariño cuando otros nos rechazaron. Cincuenta años de hermandad entre unos cofrades, que alguien quiso injuriar llamándolos "palomos", por el símbolo del Espíritu Santo que aparece en nuestro escudo. Improperios que lejos de ofendernos, nos acercan más al crucificado que veneramos y nos hacen sentirnos orgullosos de estos casi cincuenta años fraternidad.

Feliz Viernes de Dolores a todos.

(*) Historiador

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