Cáncer en Zamora: también con 21 años

El cáncer es más frecuente en edades avanzadas de la vida, pero eso no significa que no afecte también a los jóvenes con un problema añadido, que al ser más infrecuente puede tardar más en levantar sospechas.

El Centro Cultural de Caja Rural de Zamora en Condes de Alba y Aliste acogió la tarde de este jueves una actividad especial de las Jornadas Infosalud: el testimonio de jóvenes con cáncer, con la intervención del psicólogo de la Asociación Española contra el Cáncer de Zamora, Rubén Sánchez y la actuación musical de Miguel Álvarez "Inadaptado".

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"Vamos a tratar sobre la importancia de que se hable de cáncer cuando se es joven, porque pensamos que es una enfermedad que le pasa a las personas cuando tienen más edad y realmente no, tenemos datos de que la incidencia en jóvenes está ahí y tenemos que hablar de ellos", explicaba Rubén Sánchez.

Ariadna Carnero. Cáncer de mama a los 21 años

Y los jóvenes hablaron de cáncer. Por ejemplo, a Ariadna Carnero le diagnosticaron un cáncer de mama con 21 años: "Fui una paciente muy joven para ser patología de adultos. A día de hoy estoy bien, perfectamente. Me encontré un bulto en el pecho, me asusté mucho, fui al médico y a partir de ese momento empezaron a analizarlo a mirarlo y al final dedujeron que era un tumor malo y que tenía cáncer". La idea de contar su caso, es clara, "visibilizar que el cáncer no es solo una enfermedad de gente mayor, sino que la gente joven también puede tener cáncer y que al final hay vida después del cáncer". Por suerte, "no tengo secuelas, pero el tratamiento decir que es fácil es engañar a la gente, porque es un tratamiento muy duro. Pero con fuerza, con ganas de seguir adelante al final se supera".

María Zamorano, neoplasia endocrina múltiple a los 33 años

Lo de María Zamorano es más extraño, un tipo de tumor derivado de una enfermedad rara que se llama neoplasia endocrina múltiple. Se la diagnosticaron a los 33 años (ahora tiene 41) y no responde al prototipo de paciente con cáncer porque "no he tenido tratamiento, no he pasado por quimio o radioterapia, porque mi tumor no capta ese tipo de tratamientos. Está un poco en investigación todavía".

Se aborda "como se puede, con revisiones cada seis meses sí o sí. Me operaron, no quedé limpia del todo, pero ahora no se ve muy bien donde está la enfermedad, con lo cual hay que seguir mirando y esperar a que dé la cara". Derivado de su enfermedad "tuve un tumor suprarrenal y tuve en tiroides, que es el fastidiado, porque tu oyes tumor de tiroides y parece que no es nada, pero vaya si lo es. Y luego tengo otras patologías, como de corazón, que la propia enfermedad te provoca. Y lo que más te afecta es a nivel psicológico, el hecho de saber que no hay nada que de momento funcione con esto".

Marcos Sandín, cáncer colorrectal a los 34 años

Marcos Sandín sufrió un tumor más frecuente, aunque no tuvo suerte con el diagnóstico: un cáncer colorrectal a los 34 años. "El único síntoma que tenía era el sangrado y la médica de cabecera decía que era una almorrana o una fisura, y me daba antibióticos y tal, pero no se curaba. La médica no me hizo pruebas de colonoscopia ni nada de eso. Me tocó ir al privado, pagar para que me hicieran una colonoscopia y ahí apareció todo claro".

Ahora mismo Marcos se encuentra bien: "estoy perfecto, cada cuatro meses voy a Oncología a que me miren y va todo perfecto. He tenido que cambiar de trabajo, porque era mecánico y no me conviene coger pesos, pero estoy a gusto y el empleo en el que estoy ahora no me afecta para nada la enfermedad".

Toca vivir, después del cáncer: "Yo es lo que quiero, conocer a mis nietos si los tengo y ser abuelo".

Rubén Calatrava, cáncer de testículo a los 30 años

Rubén Calatrava sí tuvo un tipo de cáncer que es más habitual en edades jóvenes. "Tuve un tumor testicular hace nueve años, con 30 años. Es el que más se da en edad joven, pero bueno, me lo cogieron a tiempo y por suerte se quedó en un susto. En mi caso si dio la cara y tuve esa suerte, me lo detectaron y los diez días estaba operado".

Rubén ha llevado "bien los tratamientos y estoy haciendo la vida normal, la misma que hacía antes, sin ningún problema".

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