Un centro temático apuntala la aspiración de Zamora de ser Patrimonio Mundial

El Ayuntamiento adjudica el proyecto para crear en la margen izquierda del río una infraestructura turística interpretativa del paisaje cultural del Duero

Casa de labranza del Camino Pastelero que se acondicionará como centro de interpretación. | Alba Prieto

Casa de labranza del Camino Pastelero que se acondicionará como centro de interpretación. | Alba Prieto / Alberto Ferreras

Lograr el reconocimiento como Patrimonio de la Humanidad por parte del Unesco es una vieja aspiración de Zamora. La ciudad va a ver reforzada ahora su candidatura con un nuevo espacio temático del que el Ayuntamiento acaba de adjudicar el proyecto. Se trata de una nueva infraestructura turística que además cumplirá un segundo objetivo: el de virar el turismo hacia el Duero y los barrios de la margen izquierda del río.

Ese doble logro se materializará con la creación del nuevo Centro de Interpretación del Paisaje Cultural de Zamora y del Duero. Es precisamente ese formato, el de paisaje cultural del río vinculado a otros territorios de la provincia con los que comparte el Duero, por el que apuesta el Consistorio zamorano para presentar su candidatura ante los organismos internacionales y lograr un reconocimiento de la Unesco como el que ya gozan otras ciudades de Castilla y León como Salamanca, Segovia y Ávila.

Ruta de las «pajarrancas», que se ha balizado recientemente, con el Duero al fondo. | Cedida

Ruta de las «pajarrancas», que se ha balizado recientemente, con el Duero al fondo. | Cedida / Alberto Ferreras

El nuevo centro de interpretación se ubicará al otro lado del río, con vistas a la Catedral en una antigua casa solariega del Camino Pastelero, en las inmediaciones de la avenida del Nazareno de San Frontis. El Ayuntamiento ha adjudicado en los últimos días el proyecto de ese centro de interpretación a un estudio de arquitectura local, el de Carro González, para que lo elabore por un importe de casi 12.000 euros, en un plazo de dos meses, con el fin de sacar después a contratación las obras.

Ese centro temático forma parte de las infraestructuras contempladas en el nuevo plan de sostenibilidad turística que establece en la margen izquierda del Duero el punto de partida de las visitas a la ciudad.

Para ello, también se van a crear nuevos aparcamientos a ese lado del río, junto al espacio interpretativo, con la idea de que quienes lleguen a Zamora en autobús o en coche puedan aparca en los barrios ribereños de la margen izquierda y desde allí hagan una primera parada en el Centro de Interpretación del Paisaje Cultural del Duero y luego continúen la ruta a pie por el Puente de Piedra. Una vez remodelado el viaducto los turistas podrán cruzarlo para llegar hasta la plaza de Santa Lucía.

Ascensor panorámico

Es en la parte alta de esa plaza, al inicio de la cuesta de San Cipriano, donde se ubicará una de las infraestructuras estrella de ese Plan de Sostenibilidad Turística en Destino Zamora Paisaje Cultural. Se trata de un ascensor panorámico desde el que se accederá al mirador de la plaza de Claudio Moyano, para desde allí poder continuar el recorrido por el casco antiguo hasta la Catedral. En el templo mayor zamorano también se habilitará un segundo elevador situado en la torre de la seo para acceder a la cubierta del templo y disfrutar de sus vistas desde lo alto.

Todos estos proyectos están en marcha dentro de esa planificación turística que reordena el flujo de visitantes y ofrece un nuevo enfoque de la ciudad vinculado no sólo a los atractivos turísticos urbanos sino también al río y a un paisaje agrario de gran importancia en la historia de Zamora. En este sentido, el Centro de Interpretación del Paisaje Cultural de Zamora y el Duero ubicado en el Camino Pastelero rehabilitará una casa de labranza tradicional como forma de conservar una muestra del paisaje agrario que circundó el casco urbano y estuvo ligado a su modo de vida. El centro de interpretación contará con una sala de exposición y una aula-taller y plantea la reconstrucción de la antigua edificación con sistemas tradicionales y elementos sostenibles de bioconstrucción como el adobe, el cáñamo, la madera laminada o el barro cocido. Además, se pretenden conservar elementos tradicionales como una antigua noria, el pozo o la alberca.

Plataforma de observación y mejora de una ruta ribereña

La ruta de las "pajarrancas", también conocida popularmente como "cresta del gallo" es un singular recorrido del término municipal de Zamora que se erige como un "balcón" al Duero desde el barrio de Carrascal. El Ayuntamiento de Zamora ha finalizado ahora el balizamiento de ese recorrido.

Un centro temático apuntala la aspiración de Zamora de ser Patrimonio Mundial

Un centro temático apuntala la aspiración de Zamora de ser Patrimonio Mundial / Alberto Ferreras

El Consistorio zamorano ha informado de que la pasada semana se efectuaron los trabajos de instalación de las balizas de madera así como dos carteles informativos referentes a la ruta. Se trata de un breve paseo que transcurre junto al Duero y finaliza en uno de los miradores más espectaculares con los que cuenta la capital. Para completar la actuación, además de señalizarse la ruta se han instalado en ese mirador dos nuevos bancos de madera para que los paseantes tengan una zona de reposo tras la subida. Se trata, en definitiva, de un paseo por descubrir por los zamoranos para observar el Duero desde ese remozado "balcón" con vistas privilegiadas.

De forma paralela, el Ayuntamiento de Zamora también construye un observatorio del río y la fauna y naturaleza vinculadas al Duero en otro punto del término municipal. Para ello, el Consistorio ha encargado a una empresa especializada en estructuras de madera para su ubicación en exterior, la firma navarra Impregna, la instalación de esa plataforma de observación junto al río a su paso por la ciudad. Esa plataforma tiene un coste que asciende a 28.543 euros, IVA incluido, y una vez adjudicada, la empresa se ha comprometido a construir la instalación de madera junto al río en un plazo máximo de doce meses que ya ha empezado a contar, por lo que a lo largo de este año, o como muy tarde a comienzos de 2025, todos los zamoranos y visitantes podrán ya disfrutar de ese espacio desde el que observar de cerca o con prismáticos el ecosistema fluvial.

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