Zamora capital, responsable de la pérdida de la cuarta parte de la población provincial

La provincia de Zamora ha perdido 849 habitantes en el último año y uno de cada cuatro, 216 en total ha sido en la capital. Es el dato que arroja el padrón municipal de habitantes publicado por el Gobierno en este final de año, cuyos números son la cifra oficial de población de todos y cada uno de los municipios y provincias del país, es decir, lo que se tiene en cuenta a la hora de asignación de impuestos, prestación de servicios y todos los actos administrativos.

La provincia de Zamora tiene, según este padrón oficial, 166.366 habitantes que son 849 menos que los de un año antes. Las cifras se refieren a 1 de enero de 2023, pero son las que rigen durante el año 2024.

Puede parecer una paradoja, pero perder 849 habitantes sólo es una buena noticia para una provincia como Zamora que por primera vez en la década experimenta una pérdida de población de menos de cuatro cifras. Los efectos de la grave crisis económica de 2012 fueron devastadores para la demografía provincial, ya que en 2013 la provincia perdía la friolera de 2.838 vecinos en un año y en los tres ejercicios siguientes caía a razón de más de tres mil habitantes al año.

A partir de 2017 se empieza a moderar de nuevo el declive poblacional, a pesar de que ese año se registra también una pérdida importante de efectivos humanos en Zamora, 2.885. Los años 2018 y 2019 son de transición y en ambos se superaron aún los dos mil habitantes perdidos en cada ejercicio.

Pero a partir de 2020 las cosas se ve que marchan un poco mejor, a pesar de la mortalidad provocada por la pandemia del coronavirus. Así, ese primer año COVID Zamora pierde 1.753 habitantes, en 2021 la merma fue de 1.753 personas y al año siguiente la tendencia sigue, con 1.510 habitantes menos.

Este 2023 ha sido, pues, importantísimo para las esperanzas de futuro de Zamora, ya que la pérdida de población ha caído hasta las 849 personas. Teniendo en cuenta el crecimiento vegetativo negativo (es decir, hay muchas más defunciones que nacimientos), puede significar que algo está cambiando, para bien, en la economía de Zamora, capaz de retener un poco más a los jóvenes y sobre todo de atraer inmigrantes a estas tierras.

El saldo de esta década, no obstante, es demoledor, con casi 22.000 habitantes menos en una Zamora que recupera la alentadora trayectoria de principios de siglo, truncada por la crisis de 2012.

Falta mucho aún, sin embargo, para que Zamora no sólo pierda habitantes a menor ritmo, sino para que gane vecinos, algo cada vez más difícil incluso para las provincias más dinámicas de todo el país.

La ciudad retrocede medio millar de personas cada año

Zamora capital tiene oficialmente en estos momentos 59.259 habitantes, que son 216 menos que el año pasado y 5.727 menos que hace una década. La capital, pues, no corre mejor suerte que la provincia donde se asienta, aunque es cierto que la pérdida de habitantes en el último año ha sido, de largo, la menor de toda la década.

Los peores años demográficamente hablando han sido en el caso de la capital 2016 y 2021 cuando se perdieron, respectivamente, 828 y 822 habitantes en la urbe. Los descensos más moderados han sido los 421 y 418 vecinos de los años 2018 y 2019 y los 216 del último año.

Parece que la capital ha recuperado las sensaciones que truncó la pandemia. La capital perdió en el año 2012 la barrera de los 64.500 habitantes, y en el año 2022 la de los 60.000, si bien este dato tiene poca importancia práctica, ya que lo que se suele tener en cuenta de cara a determinadas políticas públicas es el hecho de ser capital de provincia o ciudad de más de 20.000 o cien mil habitantes.

La media de pérdida poblacional en la capital en la última década son 572 vecinos anuales, una cifra realmente importante. Y es que la capital, que durante un tiempo se libró del fenómeno despoblador de la provincia precisamente porque aprovechaba mucho de este éxodo desde los pueblos a la ciudad, al final se contagió del mal general y no pudo mantener su estatus, ahora en manos quizá, de un puñado de pueblos, muchos de ellos situados en el entorno de la propia capital.

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