El arte de Guerra Casquero en Hungría

El zamorano exhibe creaciones del proyecto "Elevar la tierra, desaparecer" en el centro de fotografía Robert Capa de Budapest

A la izquierda, el creador contemporáneo Antonio Guerra y a la derecha, las piezas del zamorano. | Cedidas

A la izquierda, el creador contemporáneo Antonio Guerra y a la derecha, las piezas del zamorano. | Cedidas / Natalia Sánchez

Natalia Sánchez

Natalia Sánchez

El Centro de Fotografía Contemporánea Robert Capa de Budapest, en Hungría, alberga la muestra internacional "Energy: Redistribuir el poder y dominar el consumo" donde el zamorano Antonio Guerra Casquero exhibe parte de su proyecto "Elevar la tierra, desaparecer".

La presencia de las creaciones del zamorano, una instalación y tres fotografías, en la antología responde a su selección por parte de varios comisarios europeos junto un total de 80 artistas que ahondan con sus obras en el mundo de la energía.

En el proyecto "Elevar la tierra, desaparecer", en el que trabaja desde hace dos años, otorga visibilidad, a través de la fotografía y de la escultura, a minas a cielo abierto, en la mayoría de los casos, donde se están llevando a cabo, entre otras medidas, planes para dar nuevos usos al suelo.

El zamorano, que ha visitado las explotaciones de Fabero, entre otros puntos, fija su atención en estos antiguos usos industriales porque "me interesan las distintas capas que aparecen en estos territorios donde gracias a los movimientos de tierra podemos descubrir las capas históricas, las geológicas o capas sociales y también los residuos presentes y los futuros conectándolos con la reflexión de vincular estos procesos con la imagen, buscando un nuevo imaginario visual", explica.

Antonio Guerra

Antonio Guerra / Cedida

Libro de artista, galardonado

Por otro lado, la Feria del Libro de Artista de Castilla y León, Librarte ha premiado a Antonio Guerra Casquero por su fotolibro "La luz que nos ciega", un proyecto donde apela al entorno natural de las zonas rurales de la España interior, principalmente de Zamora, de León y de Ávila, como espacio simbólico y de reflexión para trazar un viaje entre la razón y emoción.

El creador ha logrado el primer premio al que se han presentado 66 proyectos artísticos de autores de esta comunidad autónoma. El zamorano concurrió con el fotolibro coeditado con Dalpine y la Kursala, que cuenta con el apoyo de Caja Rural Zamora e Instituto Leonés de Cultura.

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