Nuevo arranque del Museo de Semana Santa de Zamora

La Administración autonómica concluye la redacción del proyecto, con la previsión de sacar a licitación las obras «en semanas» y reanudar los trabajos en abril

Obras de derribo del antiguo Museo de Semana Santa, acometidas a principios de año. | Ana Burrieza

Obras de derribo del antiguo Museo de Semana Santa, acometidas a principios de año. | Ana Burrieza / Alberto Ferreras

La reanudación de los trabajos del nuevo Museo de Semana Santa de la ciudad por fin empieza a ver la luz después de que haya pasado ya más de medio año desde que la empresa que ejecutaba las obras las paralizara y cuatro meses desde que oficialmente las administraciones implicadas en el proyecto, Junta de Castilla y León, Diputación Provincial y Ayuntamiento de Zamora, aceptaran la renuncia de la adjudicataria.

La Junta de Castilla y León, encargada de licitar las obras, tiene ya ultimado el pliego de condiciones de la nueva licitación, que incrementa el presupuesto destinado al nuevo Museo de la Pasión, después de que la anterior empresa renunciara y los licitantes aceptaran resolver el contrato de mutuo acuerdo para evitar que la demora fuera aún mayor. La delegada territorial de la Junta en Zamora, Leticia García, declaró este domingo que el pliego de condiciones ya está preparado y saldrá a licitación en las próximas semanas. Una vez que se anuncie la licitación comenzará a contar el plazo para que las empresas interesadas presenten la documentación necesaria para optar a erigir el nuevo y emblemático recinto museístico de la ciudad.

A partir de ahí, la mesa de contratación deberá decidir quién es el encargado de ejecutar los trabajos, en función de la oferta presentada por cada empresa o UTE interesada, y luego habrá que firmar el contrato antes de poder reanudar las obras. Eso quiere decir que «si todo va bien y no hay problemas en la tramitación administrativa las obras podrían empezar en abril», aseguró la delegada territorial de la Junta en Zamora.

Un año perdido

Eso permitirá que las máquinas vuelvan al solar del antiguo museo para acometer unos trabajos que se han encarecido como consecuencia de la subida del precio de los materiales en los últimos años y debido a las actuaciones complementarias que será necesario hacer, tanto para apuntalar un edificio contiguo como por la necesidad de conservar en otro lugar parte de una atarjea de finales del siglo XIX utilizada para la canalización del agua que se descubrió en las catas arqueológicas de las obras.

Las previsiones de reanudación de los trabajos apuntan a que se habrá perdido un año, lo que no permitirá ver el nuevo museo en todo su esplendor al menos hasta la Semana Santa de 2026, ya que las obras tenían un plazo de ejecución de dos años, se iniciaron en otoño de 2022, hay que sumar el año de paralización de los trabajos y cuando concluyan aún habrá que licitar la dotación y el mobiliario del recinto museístico.

Las obras, que comenzaron hace ahora un año con el derribo del antiguo museo de pasos, se adjudicaron por ocho millones a la UTE Coipsa-Sisocia-Exfamex. Tras la renuncia, en la nueva licitación se elevará el presupuesto a 10,3 millones de euros, lo que ha obligado a incrementar las aportaciones de las administraciones implicadas en la parte proporcional a la aportada inicialmente, 57 % la Junta y 21,5% Ayuntamiento y Diputación.

Suscríbete para seguir leyendo