Opositores zamoranos: ¡La plaza es mía!

Opositores zamoranos relatan el largo proceso que han superado para conseguir ser profesores de Secundaria o de Formación Profesional en Castilla y León

Oposiciones de educación en Zamora.

Oposiciones de educación en Zamora. / J. L. F.

Beatriz Blanco García

Beatriz Blanco García

Todo el sacrificio ha merecido la pena, ahora lo ven claro. Atrás han quedado meses —la mayoría, años— de largas horas de estudio, renuncia a la vida social y burocracia interminable. Estos zamoranos se han ganado con creces el convertirse en funcionarios de carrera y ahora desarrollan su labor docente en institutos repartidos por la extensa Castilla y León.

Seila Crespo Calvo se siente afortunada de poder realizar sus prácticas en Zamora, concretamente en el IES Río Duero, en la especialidad de Matemáticas, una de las que es habitual que queden vacantes desiertas por la dureza de las pruebas. Pero esta vez, al eliminar los problemas y que las diferentes partes no eran eliminatorias, esta zamorana pensó que podía ser su año. "Pero en octubre fui mamá y, aunque intentas sacar tiempo y motivarte, los días pasan muy rápido", se sincera.

Seila Crespo Calvo, profesora en prácticas de Matemáticas en el IES Río Duero. | Cedida

Seila Crespo Calvo, profesora en prácticas de Matemáticas en el IES Río Duero. | Cedida / B. Blanco García

Aun así, no tiró la toalla y se centró en desarrollar una unidad didáctica diferente. De la parte teórica, estudió lo que pudo y confió en la suerte. "Del temario, retienes lo que puedes de todo lo que has trabajado en años anteriores, repasas lo que te da tiempo y cruzas los dedos para que te toque un tema que sepas", resume.

Exámenes y más

Pero, una vez superados todos estos primeros tramos, la angustia no termina. "La etapa después de los exámenes también es complicada. Tras la inmensa alegría de haber aprobado, no te queda el resto del verano para descansar, porque surge la duda de que si metiendo los méritos vas a obtener la plaza", describe. Ella misma tuvo que reclamar una mala baremación. "Y luego, cuando ya puedes celebrar que tienes plaza, empiezan los nervios al pensar en dónde te enviarán de prácticas", añade.

Pero esa inquietud desapareció en seguida, cuando vio que se quedaría en Zamora. "No quiero pensar en el destino definitivo, esos nervios me los guardo para más adelante, porque si no, esto sería un sinvivir", bromea.

De Zamora a Soria

Aunque está encantada, Ruth Lorenzo González considera que ha tenido menos suerte con el destino de prácticas, ya que, con la familia en Zamora, se pasará todo el curso en el IES La Rambla, en San Esteban de Gormaz, como profesora del ciclo de Técnico Superior de Vitivinicultura. "Es complicado compaginar este éxito profesional con la vida familiar", confiesa esta madre de dos niñas. Pero se siente orgullosa de haber sacado la mejor nota de la especialidad de Procesos en Industrias Alimentarias, para la que solo había dos plazas ofertadas en Castilla y León, a las que aspiraban más de cuarenta opositores. "Después de todo el esfuerzo que me ha supuesto, fue una estupenda noticia", sonríe.

Ruth Lorenzo González, en la bodega del IES La Rambla.

Ruth Lorenzo González, en la bodega del IES La Rambla. / Cedida

Era la segunda vez que se presentaba a las oposiciones. "Iba a por todas, aunque lo más duro fue organizar los tiempos de estudio", apunta, ya que, aparte de las obligaciones familiares, trabajaba como profesora interina en el IES Alfonso IX, en el grado de Industrias Alimentarias.

Mientras se acostumbra a su nueva condición, valora el poder impartir esta formación en pleno corazón de la ribera del Duero. "Se trata de un ciclo de grado superior que tendría muchas oportunidades de futuro en la economía de Zamora, con todas las denominaciones de origen de vino que tenemos en la provincia", sugiere.

Un trabajo "para toda la vida"

Lejos de Zamora también estará este curso Javier Vasallo Álvarez, profesor en prácticas en el CIFP de Ponferrada, tras obtener plaza en Procesos y Medios de Comunicación. "Lo duro del proceso ya se conoce, pero quizá la fuerza cósmica más poderosa que te empuja a meterte en este juego de la oposición es la presión social", estima. Se refiere a esa presión de conseguir un trabajo para toda la vida. Pero admite que él también se presentó por otro motivo: "hacerlo muy bien y jugar a ganar, con unas reglas de juego que, en muchos aspectos, no tienen nada que ver con ser buen profesor", reflexiona.

De todo el proceso, se queda con lo bueno. "Lo he disfrutado, aunque supongo que haberlo conseguido endulza los recuerdos", sopesa. Por eso, destaca las horas en la biblioteca, el pincho de media mañana y ese "espíritu de Selectividad, pero con 33 años. Sentaba bien estar en Zamora, trabajar en Zamora y hacer el examen de la oposición en Zamora", recalca.

A la tercera, va la vencida

Una de la 25 plazas de Procesos de Gestión Administrativa ha sido para Agustín Manjón García, que desarrolla en el IES Vía de la Plata, en La Bañeza, distancia que recorre cada día. En su caso, a la tercera va la vencida. Con una amplia experiencia como interino —dando clase desde 2008—, este licenciado en Ciencias Empresariales probó primero con la empresa privada, pero su verdadera vocación estaba en las aulas. "Lo que más me gusta de mi labor es el trato con la gente y también el poder ser capaz de transmitir a los alumnos parte de mis conocimientos. Eso es todo un orgullo", reconoce.

Sobre los estudiantes a los que lleva dando clase desde hace quince años, acepta que han cambiado, "pero al igual que lo ha hecho la sociedad", compara. Lo mejor de este cambio, personalmente, es que la Formación Profesional "está ahora mucho más reconocida, suelen elegirla porque les atrae y tienen la esperanza de encontrar una buena salida profesional, sobre todo aquellos que optan por un grado superior", analiza.

Cambio profesional

También un cambio radical de aires profesionales fue lo que empujó a Daniel Martín Devesa a presentarse a las oposiciones de Secundaria, después de estudiar Arquitectura Técnica y trabajar en obras por toda España e incluso Chile. Ahora es profesor de Tecnología en IES Giner de los Ríos (Segovia). "Mentalmente, es agotador, porque, aparte del factor suerte, está toda la burocracia que conlleva", indica sobre el proceso.

Daniel Martín Devesa, con sus alumnos de Segovia.

Daniel Martín Devesa, con sus alumnos de Segovia. / Cedida

Esta era su tercera convocatoria, "pero la primera que me preparaba en serio, yendo a una academia, lo que recomiendo, porque así estás inmerso en el sistema y tienes a alguien que te motiva en los momentos más bajos", agradece. Aunque ya tiene su plaza, apunta que habría que reestructurar las pruebas. "Es momento de valorar algo más que la capacidad memorística, porque ahora hay otras capacidades que son más importantes", argumenta.

En la familia de Cocina

"Estudio, esfuerzo y dedicación" es la terna ganadora para Víctor Manuel Olivar, que está en prácticas en Palencia, en el ciclo de Cocina y Pastelería. Los seis años como interino y haber trabajado en el sector de la hostelería le ayudaron también a lograr su objetivo, además del apoyo de su sindicato, ANPE. "Me han guiado en todo el proceso, estaban siempre ahí para cualquier duda y siguen ayudándome", agradece.

Nuevo ciclo formativo

El CIFP Ciudad de Zamora es el centro de prácticas de Rosa Argentieri Méndez, de Servicios a la Comunidad. "Mi periplo por las oposiciones ha sido un subir y bajar de emociones. Mi consejo a los que lo siguen intentando es que no se fustiguen, no pueden permitir que esto mine su autoestima", recomienda, asegurando que, aunque el trabajo lo ha hecho ella, "tengo que agradecer todo el apoyo recibido de familia, amigos y compañeros, hasta ANPE Zamora", enumera.

Rosa Argentieri, en el CIFP Ciudad de Zamora.

Rosa Argentieri, en el CIFP Ciudad de Zamora. / Cedida

Lo que más le gusta de esta nueva etapa es poder formar parte del nuevo ciclo formativo de Integración Social. "Me gustaría ser quien inspire a mi alumnado y fomente su pensamiento crítico", anhela. También es partidaria de un cambio en estas pruebas. "Debemos dar valor a nuestro trabajo, dignidad profesional y respeto social".

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