Zamoranos por una sanidad digna: "Nos machacan, pero vamos a pelear"

Los asistentes a la movilización advierten de que la desatención médica agrava la crisis demográfica y exigen que se les deje de tratar como "gente de tercera o de cuarta"

Las pancartas de la manifestación, en la Marina. |

Las pancartas de la manifestación, en la Marina. | / Ana Burrieza

La indignación por la situación de la sanidad rural fue uno de los sentimientos predominantes dentro de la manifestación convocada este sábado en Zamora capital. Vecinos procedentes de casi todas las comarcas de la provincia agarraron la pancarta para anunciar pelea y exigir que se les deje de tratar como "gente de tercera o de cuarta". Por ahí discurrieron las quejas de personas como Francisco Pedrero, que viajó desde Moreruela de Tábara para expresar con claridad lo que opina sobre el trato que recibe su pueblo: "Estamos abandonados", señaló este zamorano.

Algunos de los asistentes, durante la lectura del manifiesto. | Ana Burrieza

Algunos de los asistentes, durante la lectura del manifiesto. | Ana Burrieza / M. H.

Pedrero protestó por el escenario al que se enfrenta su pueblo, pero también el resto de la comarca de Tábara: "Los médicos no quieren saber nada de nosotros", lamentó este vecino que indicó que "no hay manera con las consultas por teléfono" y que aseguró que "a veces no queda más remedio que desplazarse a Zamora". "Creo que no es tanto pedir que vengan a un consultorio que está nuevo", subrayó el manifestante.

Una mujer, con un cartel a favor de la sanidad. | Ana Burrieza

Una mujer, con un cartel a favor de la sanidad. | Ana Burrieza / M. H.

Los vecinos de la zona de Tábara llevan tiempo inmersos en esta batalla, pero no son los únicos. En Sayago, también proliferan las demandas ante una realidad que señala que la atención sanitaria "no es como antes de la pandemia". Así lo apuntó desde la manifestación de este sábado Begoña Pascual, una de las mujeres que sujetaba la pancarta de Monumenta. Este pequeño pueblo se ha hecho un hueco mediático gracias al contador de los días que pasa sin que el médico acuda a la localidad: "Ahora está yendo un miércoles al mes, pero antes del COVID pasaba una vez cada quince días y nos gustaría que volviera a ser así", explicó Pascual.

Una mujer sujeta un cartel a favor de la sanidad. | Ana Burrieza

Una mujer sujeta un cartel a favor de la sanidad. | Ana Burrieza / M. H.

La vecina, natural de Muga de Sayago, hizo énfasis en que "la gente de Monumenta, que es mayor, no siempre tiene familia que pueda llevarla a otro pueblo a la consulta". Esa circunstancia complica la vida de las personas en el pueblo y agrava una tendencia al vaciado que ya se percibía sin necesidad de más ayudas: "Mucha gente opta por quedarse en las ciudades", reconoció Pascual, consciente de que la gente, "sin médico, se marcha".

Representantes de UGT, al lado de la Delegación Territorial. | Ana Burrieza

Representantes de UGT, al lado de la Delegación Territorial. | Ana Burrieza / M. H.

Cerca de la pancarta de la citada localidad sayaguesa, algunos paisanos de Fermoselle caminaban tras otro cartel que demandaba "un centro de salud 24 horas y 365 días" en el municipio. Dos de los vecinos que acompañaban la comitiva deslizaron que lo importante, más allá de ese asunto concreto, era asegurar que "los pueblos no queden abandonados por falta de asistencia médica" y que el dinero que debería ir a garantizar esos servicios "no marche para Cataluña o para otras comunidades".

"No nos tratan como ciudadanos de segunda, porque eso está muy cerca de primera; nos consideran de tercera o de cuarta", clamó una de las mujeres fermosellanas, que prefirió ocultar su nombre. Eso sí, tanto ella como el hombre que la acompañaba dejaron claro que hay cosas que no se pueden permitir: "Cae una persona enferma y tardan dos horas en llegar para asistirla", alertaron.

"No nos tratan como ciudadanos de segunda, porque eso está muy cerca de primera"

Desde Toro y su comarca, los asistentes a la movilización por la sanidad remarcaron de igual modo "el problema grave" que afecta al territorio. Carlos Rodríguez puso sobre la mesa "los problemas con el pediatra" y la agonía de los pueblos que "han estado meses y meses sin la presencia de un médico". A eso se suman las interminables listas de espera para determinadas citas que golpean también a los habitantes de la capital: "Con lo de los especialistas nos están machacando, pero vamos a pelear", afirmó Rodríguez, convencido de la necesidad de resistir.

Suscríbete para seguir leyendo