La factura farmacéutica marca el récord de la última década en Zamora y ya se acerca a los 57,6 millones de euros. El gasto farmacéutico suma y sigue, impulsado por el incremento de la edad de la población, que lleva al aumento perfiles de personas con varias enfermedades (pluripatológicos) y la cronicidad y la aparición de nuevos principios activos en el mercado.
Zamora cerró el año con prácticamente 57,6 millones de euros, frente a los 54,5 del año anterior, lo que supone un incremento del gasto superior a los tres millones de euros.
También se movió el cifras récord el número de envases consumidos, 4.753.270, es decir por encima de los doscientos mil más que durante el año anterior. Zamora fue precisamente la provincia de Castilla y León donde más se incrementó el número de envases, un 4,09%, aunque ha subido en todas las provincias.
Estas cifras suponen que cada zamorano consume una media de casi 30 envases de medicamentos al año, 2,47 al mes, la segunda cifra más alta de la comunidad, sólo superada por Ávila, con 2,53.
Con respecto al importe económico, en Zamora creció un 5,56%, el mayor de toda la comunidad. Y somos precisamente los zamoranos los que más gastamos en botica, o mejor dicho, lo que Sacyl paga más en medicamentos, una media de casi 30 euros por habitante y mes (29,92 euros exactamente), frente a 24,4 de media autonómica.
Este gasto representa la cuantía que se financia de todos los medicamentos prescritos y dispensados en receta del conjunto de Sacyl.
El gasto medio por envase, sin embargo, no es demasiado elevado en Zamora, 12,12 euros, cifra muy cercana a la media autonómica, de 12,04 euros.
Los datos indican también que el porcentaje de aportación de los beneficiarios de la Seguridad Social en el coste de los medicamentos es muy bajo en Zamora, donde apenas se paga, de media, un 7,1% de lo que cuesta el medicamento, frente a un 7,92 de media autonómica. El porcentaje de aportación bajó en el último año nada menos que el 21%, seis puntos más que la media autonómica.
Tipos de medicamentos
El análisis por grupos terapéuticos (sólo disponible a nivel autonómico, no provincial) arroja que las personas 75 o más años son las que consumen más medicamentos, excepto en el caso de los productos antiparasitarios, insecticidas y repelentes, informa Ical. Representan el 40,19% de los envases, seguidos, por los grupos de las horquillas de entre 65 y 74 y 55 y 64, con un 22,05% y un 17,17%. La población entre 15 y 44 representa un consumo del 9,03% y la de entre 45 y 54, del 9,97%. Mientras, los niños alcanzan un 1,5% , con un 0,057 en el caso de los que menores de cinco años, y un 1,01% en el grupo de 5 a 14.
Por grupo terapéutico, la población de 75 años o por encima lo que más consume son fármacos para el tracto alimentario y metabolismo; sangre y órganos hematopoyéticos, y para controlar el sistema cardiovascular, patrón que se repite entre quienes tienen entre 65 y 74 años. De hecho, estos grupos entran en los que representaron mayor gasto el año pasado, así como en ejercicios anteriores, con impactos del 21,28% , en los de tracto alimentario; del 23,89, en los del sistema nervioso, y del 17,8% en el del sistema cardiovascular. Los tres superan el 60% del gasto.
Edades
Entre los 45 y los 64, los más consumidos son los agentes antineoplásicos e inmunomoduladores; para el sistema musculoesquelético, y productos antiparasitarios. Este grupo es el mayoritario entre los que tienen entre 15 y 44, junto a los productos dermatológicos y para el sistema respiratorio, al igual que entre los de 5 a 14. Los bebés y los menores de cinco años lo que más precisan son fármacos antiinfecciosos para uso sistémico, dermatológicos y preparados hormonales sistémicos.
En función del sexo, se observa que los hombres gastan más con un importe medio por envase de 15,38 euros en casi todos los grupos terapéuticos, mientras que el importe medio de las mujeres es de 12,07 euros.
El presidente del Colegio de Farmacéuticos de Zamora, Juan Prieto Corpas, señala que en los últimos dos años apunta algunos factores a tener en cuenta, como el hecho de que haya aumentado, sobre todo en los dos últimos años, el número de personas desplazadas que adquiere la medicación en la provincia y la dispensación de fármacos en el ámbito hospitalario, también creciente. Indica que hay medidas para rebajar el gasto farmacéutico, pero la factura sube por la incorporación de nuevos tratamientos más novedosos.
