La VIII San Silvestre toresana, una carrera donde la diversión no falta
Habrá un premio especial para el primer Papá Noel que cruce la línea de meta
Irene Alfageme
La VIII San Silvestre toresana, la última carrera del año el 31 de diciembre es el preludio de la Nochevieja y ya es un clásico en la localidad; o eso opina el primer edil Rafael González. “Es una carrera que tiene una gran aceptación y lo bueno que tiene es que hay dos formas de hacerla, una para divertirse y otra para correrla. A mí me gusta sobre todo por la diversión y el buen ambiente que hay”, relata.
Gorka García, organizador, detalla que rondarán entre los 200 y 300 participantes, “un margen marcado por el tiempo que haga ese día”, señala. La carrera, que comenzará a las 18.00 horas de la tarde, tiene como punto “especial” que participa gente que no ha corrido ninguna carrera durante todo el año.
En relación con el recorrido es el siguiente: comienza en el Arco de Corredera, después se sube hasta la gasolinera Repsol, se pasa por Antona García para llegar hasta la carretera del barrio del Carmen, la Plaza de San Agustín; después se pasa por calle Barrios, calle Mayor, calle Puerta del Mercado y, finalmente Corredera hasta llegar de nuevo al Arco. Un total de 4,7 kilómetros repartidos en dos vueltas.
Para los participantes hay premios; en primer lugar, habrá para el mejor mejor disfraz individual para pareja y grupo, además de haber “un premio especial para el primer Papá Noel que cruce la línea de meta”, detalla García. También hay tres premios de la general en categoría masculina y femenina.
Las inscripciones tienen precio de 5 euros y se pueden realizar en Modas Carmen o en la página web www.runvasport.es, pero también se pueden hacer ese mismo día, con un precio de 6 euros a partir de las 16.30 en la carpa de los Reyes Católicos, donde tendrá lugar la entrega de los premios, sobre las 19.00 horas. Además, con la entrega de dorsales se dará una “braga tapa cuellos” y un gorro de Papá Noel de regalo. Por último, García agradece la colaboración del ayuntamiento y el resto de colaboradores, ya que "sin ellos no podría haberse hecho".
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