Toro, a los pies de la Virgen del Canto
Los toresanos arropan a la imagen de su patrona, 19 años después de su última salida extraordinaria, en la procesión organizada por el fin de la pandemia
Toresanos portan a hombros la imagen de la Virgen del Canto en la procesión / MARIA JESUS CACHAZO
Han pasado 19 años desde que la Virgen del Canto abandonara por última vez su ermita en procesión, para conmemorar el 50 aniversario de su coronación.
Desde entonces, los toresanos han venerado a la patrona de Toro y su Alfoz en la ermita construida en la zona en la que, según la leyenda, un labrador encontró la imagen.
En el entorno del templo se congregaron numerosos toresanos que en el día previo a la festividad de la patrona asistieron a las “vísperas” y a la lectura de la historia de la cofradía y de la Virgen del Canto.
Los fieles devotos no pudieron contener la emoción y algunas lágrimas ante la salida de la procesión extraordinaria, que tan solo se celebra cada 25 años, por una rogativa o por situaciones excepcionales como una epidemia, una guerra, una catástrofe.
Para la cofradía y la corte de la Virgen del Canto el fin de la pandemia del COVID era un hecho extraordinario tan relevante que decidieron solicitar autorización al obispado para organizar el solemne desfile que recorrió las calles de la ciudad.
De la comitiva, además de responsables de la cofradía y de la corte de la Virgen también formaron parte representantes del resto de hermandades de Pasión y de gloria de Toro, así como representantes municipales de la ciudad y de otros pueblos del Alfoz.
Uno de los momentos más emotivos de la procesión se vivió a las puertas del monasterio del Sancti Spíritus, en el que las hermanas dominicas esperaron emocionadas el paso de la procesión y entonaron una canción dedicada a la Virgen del Canto, a la que obsequiaron con un ramo de flores, que fue depositado en las andas.
GALERÍA | Toro arropa a su patrona en una procesión histórica / M. J. Cachazo
Los miembros de las familias de Toro que ostentan el privilegio de cargar con la venerada imagen en sus contadas salidas procesionales ocuparon los banzos de las andas para, con orgullo, sentir sobre sus hombros el peso del legado de sus ancestros.
No obstante, en los necesarios relevos por el peso de la imagen, otros toresanos cargaron con las andas en el recorrido trazado para el desfile, que discurrió con paso lento y acompasado por la música de las Bandas "Bendito Cristo de las Tres Caídas" y "La Lira", por diferentes calles del casco histórico hasta la Plaza Mayor, en la que se celebró el solemne homenaje a los difuntos de la pandemia y a sus familiares.
En el mismo espacio, tuvo lugar la tradicional presentación de niños de corta edad ante la imagen para implorar su protección. Acto seguido, prosiguió el desfile procesional hasta la Colegiata, en la que una vigilia dio paso a la entonación de la Salve.
La Virgen del Canto regresará este viernes a la ermita acompañada por la comitiva integrada por ciudadanos y autoridades, que partirá a las 10.30 horas de la Colegiata.
Dos horas más tarde, en el templo de la patrona se celebrará la tradicional ofrenda floral y la misa de fiesta.
La jornada festiva será clausurada por la tarde con la actuación en el entorno de la ermita de grupos de folclore y con el concierto que la Banda La Lira ofrecerá en honor de la patrona de Toro y su Alfoz en la Plaza Mayor.
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