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Zamora, la candidata perfecta

Los trenes de hidrógeno ofrecen una serie de ventajas ambientales sobre los trenes diésel

Puente sobre el Valderaduey de la línea convencional, durante el paso en pruebas de un tren movido con hidrógeno

Puente sobre el Valderaduey de la línea convencional, durante el paso en pruebas de un tren movido con hidrógeno / Asociación Ferroviaria Zamorana

En la búsqueda incansable de alternativas sostenibles para reducir las emisiones de carbono y mitigar el cambio climático, la industria ferroviaria es sin duda un campo de acción crucial. En este sentido, el desarrollo de trenes de hidrógeno, destinados a reemplazar a sus contrapartes diésel, representa un hito significativo en la carrera hacia la descarbonización. Las pruebas que se están desarrollando con las primeras unidades que aplican la nueva tecnología de hidrógeno en movimiento tienen a nuestra provincia entre su recorrido. Así, estos días podremos observar cruzar la estación los trenes duales de hidrógeno renovable Vittal-One construidos por Talgo.

Los trenes de hidrógeno ofrecen una serie de ventajas ambientales sobre los trenes diésel tradicionales. En primer lugar, el hidrógeno verde es obtenido mediante el uso de energías renovables en su producción, lo que lo convierte en un combustible limpio, sostenible y con un índice de contaminación cero. De esta forma, al utilizar hidrógeno como combustible, los trenes pueden funcionar sin emitir gases de efecto invernadero ni partículas contaminantes, contribuyendo así a mejorar la calidad del aire y reducir la huella de carbono del transporte ferroviario. Además, este nuevo tipo de tren es más silencioso que su predecesor diésel, lo que reduce la contaminación acústica y mejora el entorno en áreas urbanas y suburbanas.

La instalación de fábricas de este recurso en la región no solo generaría empleo y actividad económica, sino que también aceleraría la transición hacia un modelo energético más limpio y descentralizado

La implementación exitosa de trenes de hidrógeno en el sector ferroviario requiere un enfoque integral que abarque desde la producción hasta la infraestructura de suministro de combustible. En este contexto, la inversión en infraestructuras de hidrógeno renovable desempeña un papel fundamental. Empresas como Repsol han reconocido esta necesidad y están liderando el camino hacia una economía del hidrógeno más sostenible. De hecho, esta compañía es la encargada de proporcionar la infraestructura para generar el hidrógeno renovable y suministrar la energía limpia que permite el funcionamiento del tren.

La provincia de Zamora, con su abundancia de recursos naturales y su ubicación estratégica, sería un lugar idóneo para la producción de hidrógeno renovable. La instalación de fábricas de este recurso en la región no solo generaría empleo y actividad económica, sino que también aceleraría la transición hacia un modelo energético más limpio y descentralizado. Además, al impulsar la producción local de hidrógeno renovable, se contribuiría a fortalecer la resiliencia energética de la provincia y a reducir la dependencia de combustibles fósiles. Esto no solo beneficiaría a nuestra provincia, sino que también sentaría un precedente importante para otras regiones que buscan la transición hacia una economía del hidrógeno más sostenible.

Algunas empresas como Tresca, principal consultora de hidrógeno verde en España, han reconocido el papel potencial de la provincia como región productora de energías renovables y sondean instalar sus fábricas en Zamora en un esfuerzo continuo de la Delegación de la Junta de Castilla y León en impulsar nuestra tierra.

Los trenes de hidrógeno representan una oportunidad única para descarbonizar el sector ferroviario y avanzar hacia un futuro más sostenible. Sin duda, la provincia de Zamora es la candidata perfecta para instalar infraestructuras que generen hidrógeno verde.

Profesor de Física y Analista de Datos

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