Jenni Hermoso asegura al juez que el beso de Rubiales fue inesperado y no consentido

Jenni Hermoso se reafirma ante el juez Francisco de Jorge. La jugadora de la Selección Española de fútbol ha declarado este martes en la Audiencia Nacional por el caso Rubiales, donde ha reafirmado que el beso que recibió del expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) fue inesperado y en ningún momento consentido, según confirman a El Periódico de España, del grupo Prensa Ibérica, fuentes jurídicas.

La jugadora también ha explicado al juez instructor que investiga a Luis Rubiales por los presuntos delitos de agresión sexual y coacciones que el atosigamiento constante al que se vio sometida en los días después del beso alteró su vida normal, produciéndole una situación de desasosiego y tristeza, según especifican las citadas fuentes jurídicas consultadas.

Más de dos horas de declaración

Hermoso, que de forma reciente ha fichado por el club de los Trigres de México, ha llegado a las dependencias de la Audiencia Nacional alrededor de las 9:50 horas acompañada de su abogado Ángel Chavarría y de su representante, además de por la letrada Olga Tubau. Tras recorrer andando el paseo peatonal que conduce a la puerta de acceso charlando con sus acompañantes.

Más de dos horas después, Hermoso atendió a los numerosos medios de comunicación para agradecer el tratamiento de la información y concluir que tras su comparecencia ya "todo queda en manos de la justicia".

Tal y como adelantó esta redacción, la Fiscalía ve indicios sólidos de agresión sexual y coacciones en la conducta de Luis Rubiales y de la comisión del segundo de los delitos por parte del resto de imputados, que son el exseleccionador femenino Jorge Vilda y los directores de la selección masculina, Albert Luque, y de marketing de la RFEF, Rubén Rivera.

Cabe recordar que el titular del Juzgado Central de Instrucción Número 1, Francisco de Jorge, la citó inicialmente para que declarase como testigo el pasado 28 de noviembre, pero dos defensas --entre ellas las del propio Rubiales-- solicitaron su aplazamiento al coincidirles con otros procesos judiciales.

La jugadora ya declaró ante la teniente fiscal de la Audiencia Nacional, Marta Durántez, antes de que se incoasen diligencias. Entonces, la jugadora defendió que no se sintió respetada. "Me estaban sometiendo a algo que yo en ningún momento busqué ni hice para encontrarme con esa situación", desveló.

En la declaración ante Fiscalía, revelada por Telecinco, la jugadora de fútbol narró el momento en el que recibió el beso después de que España ganara el Mundial femenino. Según su relato, se abrazó con Rubiales y afirmó: "La que hemos liado". Después, el expresidente de la RFEF pegó un brinco sobre ella y le comentó: "Este Mundial lo hemos ganado gracias a ti".

"No me lo esperaba"

"Lo siguiente ya fue sus manos en mi cabeza y ya ahí no escuché nada más. Me vi con el beso en la boca y ya directamente me bajé a la tarima con mis compañeras", rememoró Hermoso a preguntas de la fiscal. "Ni me lo esperaba", añadió la deportista. En este punto, la futbolista recordó que la victoria del Mundial fue un "hecho histórico" que costó "la vida conseguirlo''.

"En ningún momento me podía esperar que pasara al final algo así (...) En una persona de confianza creo que nadie se esperaría que iba a usar ese momento para hacer algo así, por muy espontáneo que fuera", reprochó Hermoso, que también explicó que cuando bajó de la tarima contó lo sucedido con Rubiales a sus compañeras de equipo Alexia Putellas e Irene Paredes.

Una muestra de afecto consentida

Ante el juez, Rubiales defendió que el beso fue una "muestra de afecto" que se produjo de forma "natural", a la luz de "millones de ojos" y que fue "con consentimiento". A preguntas del abogado de Hermoso, aseveró que se trataba de una "celebración totalmente extraordinaria", que preguntó a la jugadora antes de darle el beso y que ocurrió "con consentimiento".

"Sí le pregunté antes ¿cómo no le voy a respetar?", respondió a la pregunta de si consideraba que había respetado a la jugadora al besarla en la boca, para luego apuntar que Hermoso tras ese episodio "se fue muerta de risa" y dándole "dos cachetes en el costado".