Los nuevos hallazgos de la campaña arqueológica en el "Castrico" de Rabanales

La campaña arqueológica "Castrico 2023" en Rabanales concluyó cerrando la segunda fase de Castrum Zoelarum iniciada en 2020. Este año siguieron los trabajos en los sondeos 2 y 3 abiertos en 2021 y 2022 y, en ambos, "los hallazgos de estructuras y materiales nos ayudan a descifrar más sobre el tipo de asentamiento romano que podría haberse encontrado en las tierras de labranza de El Castrico.

En 2020 tuvo lugar una prospección con georradar que indicaba numerosas estructuras bajo tierra, sondeos 1, 2 y 3 y gracias a las excavaciones se comprobó que esas estructuras se correspondían con casas romanas de entre los siglos I y II después de Cristo".

Emperador Claudio

Los trabajos del sondeo 2, fueron coordinados por el arqueólogo Jaime de la Vega Ramos (Zamora Protohistórica) conocedor de este sondeo que lleva dirigiendo desde 2020. Se trata de una amplia zona de excavación que en años anteriores sacó a la luz varias estancias de grandes dimensiones y planta cuadrangular entorno a un espacio público de tránsito abierto cuya finalidad aún se desconoce debido a los pocos paralelismos relacionados.

Gracias a los hallazgos de materiales en este sondeo, en 2020 se pudo fechar el asentamiento en el siglo I después de Cristo, más en concreto en época del emperador Claudio. Este año, se han podido ampliar aún mas las estructuras habitacionales que formaban parte de este sondeo, en concreto una estancia de grandes dimensiones en el extremo oriental del sondeo. Las estancias se encontraban pavimentadas con diferentes tipos de suelos y en ellas podrían haberse realizado diferentes trabajos posiblemente relacionados con la metalurgia.

Los trabajos de investigación del sondeo 3 los coordinó la arqueóloga Sofía Rojas Miguel. Si el sondeo 2 es importante en extensión, el 3 lo es en profundidad, puesto que en una potencia estratigráfica muy reducida se han podido determinar dos fases constructivas en las que la más tardía reaprovecha estructuras y muros de la fase anterior, siempre en un margen de tiempo de uno o dos siglos entre el I y II después de Cristo.

Ello indica el grado de reforma que algunas estructuras arquitectónicas del asentamiento sufrieron, puesto que si bien es un poblado con trama organizada, no está exento de replanteamientos y reformas como parece verse en este sondeo.

Estancias pavimentadas

Este año se han descubierto nuevas estancias pavimentadas con suelos preparados de tierra apisonada y lajas de pizarra, así como canalizaciones con tejas e ímbrices. La arqueóloga Cristina Rodríguez Coto (Zamora Protohistórica), en prácticas gracias a un convenio con la Universidad de Salamanca, colaboró en este sondeo con Sofía Rojas. Participa en el proyecto Castrum Zoelarum desde el año 2019, cuando aún se excavaba en el Castro de la Encarnación de Mellanes.

Tras los meses de excavación durante el verano, toca procesar la información en el laboratorio durante el otoño. Actualmente el equipo de Zamora Protohistórica se encuentra investigando con los materiales arqueológicos extraídos y con el registro fotográfico de las estructuras encontradas.

Zamora Protohistórica culmina este año las excavaciones en el Castrico de Rabanales

Francisco Javier González de la Fuente (Zamora Protohistórica), codirector de las excavaciones estudia los materiales del yacimiento junto con el equipo de técnicos mencionados demás de Rafael Soler Rocha y Xabier Eguilleor Carmona, coordinados por Óscar Rodríguez Monterrubio, presidente de Zamora Protohistórica; la arqueología digital aplica tecnología de recogida de datos y su procesado con la finalidad de organizar la investigación y facilitar su estudio, pero también su difusión.

Xabier Eguilleor Carmona (Universidad de Salamanca) y Rafael Soler Rocha (arqueólogo profesional) ambos de Zamora Protohistórica, dedican su trabajo precisamente a la arqueología digital, gracias a la cual se va registrando la excavación estrato tras estrato usando las últimas tecnologías para los levantamientos 3D y la fotogrametría por medio de vuelos con Dron.

Digitalización

Todo este trabajo de digitalización en la arqueología permite crear un banco de datos digitales y de imágenes que recogen y muestran toda la información arqueológica relevante y por ejemplo han permitido la construcción en sketchfab del museo virtual del proyecto Castrum Zoelarum sketchfab.com/tags/zamoraprotohistorica, que sitúa a este proyecto y a los yacimientos arqueológicos de La Encarnación (Castro de la Edad del Hierro en Mellanes) y El Castrico (Romanización en Rabanales) en la vanguardia de la difusión abierta y pública en arqueología a nivel nacional.

Sofía Rojas, experta en cerámica, se encarga de determinar las características tipológicas de las piezas recuperadas, su factura, posible procedencia y estado de conservación y "con esta información ya pudimos determinar en campo que los habitantes del castrico utilizaban cerámicas sigillatas fabricadas en el alfar de Tritium (La Rioja) e incluso algunas piezas provenían de la provincia romana de La Bética, al sur de la Península Ibérica, lo que indica una importante red de comunicaciones entre diversos territorios romanizados durante el siglo I después de Cristo".

Además, precisó que "en la actualidad estamos trabajando para determinar también la pervivencia de facturas cerámicas prerromanas en estas cronologías mas tardías, así como la presencia en el repertorio cerámico de otras piezas como jarras, ollas o ánforas que puedan indicarnos actividades como la cocina, el almacenaje o el comercio, de estas comunidades que acaban de entrar en la romanización".

En la segunda quincena se recibieron 18 voluntarios y voluntarias de universidades de España como Granada o Salamanca, e incluso una de Portugal. El equipo de voluntariado desempeña directamente los trabajos de excavación supervisados por el equipo directivo de la excavación formada por los directores y técnicos de Zamora Protohistórica.

La excavaciones avalan que “El Castrico” de Rabanales surgió hace dos mil años

En este punto, es destacar la labor de Sofia Rodríguez Palomar, arqueóloga zamorana de la asociación que coordinó todas las gestiones diarias que tienen que ver con la organización del voluntariado, como puede ser el avituallamiento, organización del almuerzo en campo o compra.

El Ayuntamiento de Rabanales, presidido por Santiago Moral, y la Fundación Fomento Hispania ha colaborado financiando Castrum Zoelarum: un ejemplo es la prestación de servicios de alojamiento y comida (comedor social de Grisuela) que el consistorio puso a disposición de los arqueólogos alojados en Rabanales.

Por las mañanas trabajo de campo y por las tardes trabajo en laboratorio, procesando imágenes y toma de datos, organizando el registro de campo o limpiando materiales arqueológicos como cerámicas romanas decoradas (sigilata, mucho más abundantes que en campañas anteriores), vidrios o metales, siempre supervisados por los voluntarios, expertos y miembros de la asociación.

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