Infraestructuras

Aprovechar el trazado original del Ruta de la Plata en Benavente "ahorraría costes y tiempo"

Los ingenieros del Movimiento Corredor del Oeste que trabajan en un proyecto paralelo al ministerial apuestan por la vieja traza del tren

El uso de la hoy vía verde evitaría estudios ambientales y expropiaciones y el coste rondaría los cinco millones de euros por kilómetro

Un ciclista en el puente de hierro del ferrocarril sobre el río Esla en Villanueva de Azoague, actualmente convertido en vía verde.

Un ciclista en el puente de hierro del ferrocarril sobre el río Esla en Villanueva de Azoague, actualmente convertido en vía verde. / J. A. G.

El aprovechamiento de la antigua traza del ferrocarril de la Ruta de la Plata entre Salamanca, Benavente y Astorga, "permitiría, no sólo una reducción importante de la inversión necesaria para la nueva línea, sino también haría menor la ocupación de terrenos, el impacto ambiental y el plazo de la construcción".

A esta conclusión ha llegado el equipo de ingenieros que desde hace medio año colabora con el Movimiento del Corredor del Oeste Ruta de la Plata y trabaja en la redacción de un proyecto paralelo al ministerial.

La traza discurre en línea recta entre Salamanca y Astorga al igual que entre Zamora, Benavente y Astorga, por lo que el tendido de una nueva vía sobre la antigua plataforma, que en el caso del tramo benaventano es hoy por hoy vía verde, sería a su juicio la opción más factible y viable.

Via verde por el trazado del antiguo ferrocarril, cuya plataforma es la opción más válida para el nuevo trazado según el equipo de ingenieros.

Via verde por el trazado del antiguo ferrocarril, cuya plataforma es la opción más válida para el nuevo trazado según el equipo de ingenieros. / J. A. G.

Este equipo ha diseñado una línea ferroviaria para tráfico de mixto de viajeros y de mercancías. Estaría electrificada (2x25 kV), tendría vía única y un ancho ibérico (1.668 mm), desde Astorga hasta Plasencia, pasando por La Bañeza, Benavente, Zamora, Salamanca, Guijuelo, Béjar y Hervás. En el tramo benaventano se mantendrían todas las estaciones, incluyendo la de Benavente, así como los puentes. Solo sería preciso retirar los pasos a nivel que aún quedan en algunos puntos.

El equipo estima las velocidades máximas serían del orden de 230-250 km/h para trenes de viajeros; y vías de apartado de hasta 1.050 metros útiles para los trenes de mercancías, con rampas adecuadas para los tráficos que se prevea que se puedan encaminar por ella. Benavente podría contar con tres trenes de pasajeros de ida y vuelta.

Reutilización de la estación

La idoneidad del trazado original para acoger la nueva infraestructura ferroviaria tendría una clara repercusión en tiempos y en costes, al no ser necesarias expropiaciones de suelo, ni evaluar el impacto ambiental del trazado ya existente, y a la vez tener encaje en la Ley ferroviaria.

Se estima que cada kilómetro de vía requeriría una inversión de cinco millones de euros y que el tiempo de construcción entre Salamanca-Benavente-Astorga sería de seis a siete años. Si las obras comenzaran hoy, mantiene el equipo de ingenieros, la reapertura en esta parte de la Plasencia-Astorga podría ser una realidad en 2030 o 2031.

Un ciclista en la vía verde del antiguo trazado de ferrocarril.

Un ciclista en la vía verde del antiguo trazado de ferrocarril. / J. A. G.

El ferrocarril combinaría el transporte de pasajeros, con conexiones posibles hacia Lisboa y el norte de España y de Europa, con el de paquetería de un modo similar a la antigua línea, pero completamente modernizada.

Aprovechar la infraestructura y las estaciones de la línea de Plasencia a Astorga, cerrada para el tráfico de viajeros en 1985 y para el de mercancías en 1996, "ofrecería en gran parte de su recorrido un buen trazado y un encaje adecuado en los núcleos urbanos y a la vez minimizaría el impacto ambiental". Incluyéndola, defienden, en la red básica de la RTE-T, el objetivo sería que en 2030 estén en servicio los primeros tramos, el de Benavente entre ellos, y que para 2033 esté en servicio la línea completa.

"Aprovechando el trazado original se haría innecesario realizar un estudio de viabilidad que va a durar dos años y que no es necesario porque la traza antigua es perfectamente válida y solo requeriría de un estudio informativo previo a la redacción del proyecto y a la licitación de las obras", explica desde Badajoz el portavoz y coordinador interterritorial del Movimiento, José María Alonso.

"La línea no debe verse como algo que más tarde o temprano habrá que hacer por razones políticas, sino como algo útil, tanto para los territorios por los que pasa como adyacentes; para el mallado, aumento de capacidad y resiliencia de la red existente, y para la recuperación del tráfico de mercancías en beneficio del medioambiente", alega el equipo de ingenieros.

María Jesús Martínez y José Ignacio Regueras, ayer, en la estación de ferrocarril de Benavente. | J. A. G.

María Jesús Martínez y José Ignacio Regueras, ayer, en la estación de ferrocarril de Benavente. | J. A. G. / J. A. G.

Una economista y un biólogo se ponen al frente del Movimiento en Benavente y en la comarca

La economista María Jesús Martínez de Anta y el biólogo José Ignacio Regueras se han puesto al frente del Movimiento del Corredor del Ruta de la Plata en Benavente para reivindicar la reapertura del ferrocarril y canalizar las acciones conjuntas del colectivo en todo el trazado.

Ambos han mantenido contactos con el coordinador interterritorial y portavoz general, José María Alonso, para que Benavente cuente con representación específica.

"El espíritu principal no es otro que en Benavente se lleve a cabo y se promueva, se reivindique y se luche por todo el trayecto que hay desde Plasencia hasta Astorga y que empiece a funcionar en 2030, porque esta zona necesita un impulso tanto económico como social", explica María Jesús Martínez.

"Económico, en cuanto a movimiento de mercancías. Esta es una vega que tiene una producción bastante importante a nivel agrícola y hay empresas alrededor de la zona que merecen tener un tránsito de mercancías a través del ferrocarril. Además, sería un soporte fundamental para el Centro de Transportes. Y a nivel social porque el tren facilita el movimiento de ciudadanos y, además, pensando en la juventud, los estudiantes podrían volver a viajar en tren para ir a Salamanca o Zamora, como toda la vida se ha hizo", añade.

Regueras y Martínez conversando en la estación de ferrocarril.

Regueras y Martínez conversando en la estación de ferrocarril. / J. A. G.

"Esto debería ser un movimiento transversal de todas las fuerzas políticas. Somos David contra Goliat, pero irrita que se hable de la ampliación del Aeropuerto de Barajas y aquí que se estudiará para el año 2040 o 2050. Esto es una tomadura de pelo. Por razones económicas, por razones sociales y por razones ambientales y ecológicas, por la sostenibilidad, es evidente que el ferrocarril es necesario. ¿Qué cada vez hay menos gente en la zona? Si hay menos servicios habrá menos gente y menos economía. Es evidente que es necesario y que debe de ser un movimiento de todas las fuerzas políticas", argumenta José Ignacio Regueras.

"Independientemente de que tenemos contacto con el Movimiento en Badajoz y Zamora lo que buscamos en Benavente es ampliar el número de personas que se quieran unir siempre pensando que esto es por el bien de Benavente y por el bien de toda la comarca. Y en cuanto al impacto medioambiental, es necesario tanto que hablan de la Agenda 2030. Hace quince días visualicé con claridad que en 80% de tránsito por carreteras eran camiones por mercancía y el impacto es importantísimo. Si no lo hacen ahora nos marginarán", apostilla Martínez.

Martínez Anta y Regueras, que han elaborado un primer manifiesto de apoyo a la reapertura (puedes leerlo y descargarlo aquí), prevén contactar con los representantes de todas las formaciones políticas benaventanas.

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