Un grado que abre las puertas a un nuevo futuro profesional

Fue en el curso 2021-2022 cuando se implantó en el Campus Viriato de Zamora un nuevo grado para la Escuela Politécnica Superior, centrado en el Desarrollo de Aplicaciones 3D Interactivas y Videojuegos. Desde entonces, estos estudios han cubierto todas las plazas disponibles, demostrando así que se trata de una formación con gran demanda y un futuro más que prometedor. "El objetivo general del título es el de formar profesionales con las competencias necesarias para diseñar y desarrollar tanto aplicaciones interactivas en diferentes campos profesionales y científicos como videojuegos y aplicaciones dirigidas al entretenimiento", resume el profesor Manuel Pablo Rubio Cavero.

Más allá del campo de los videojuegos, esta formación también está enfocada a aplicaciones en otros sectores que no son exclusivamente de ocio, "con una gran proyección futura, como las aplicaciones industriales, la medicina y la salud, la educación o el turismo", pone como ejemplos el docente de la Politécnica.

De lo que no hay duda es de que el sector del entretenimiento interactivo está en alza. La Asociación Española de Videojuegos (AEVI) en su informe sobre el impacto económico del sector indica que los perfiles profesionales más presentes en la industria son los de programador, artista y diseñador de juego, "el primero de ellos también entre los más demandados", detalla el profesor. "La programación se encuentra también en primera posición entre los perfiles profesionales que verán incrementada su demanda en los próximos cinco años", añade.

Así que las salidas profesionales de los egresados van mucho más allá del software de entretenimiento. "Están emergiendo en otros campos diferentes, como aplicaciones interactivas de otros tipos, con gráficos 3D en tiempo real, y otras completamente novedosas que se están empezando a desarrollar en la actualidad y que los alumnos del grado podrán explorar en un futuro", vaticina. Y es que existen también múltiples aplicaciones industriales, desde la optimización de diseños hasta el entrenamiento de operarios, la simulación de manejo de aparatos o la resolución de incidencias, "pero también entrenamiento y simulación militar, arquitectura, construcción y diseño de interiores o el sector del turismo, con visitas virtuales e interactivas", pone como ejemplos.

Marcos Antón, docente e investigador zamorano especializado en videojuegos, coincide al señalar que este sector "ha traspasado las barreras del ocio, llevándose a otros sectores como el informativo, el museístico o incluso el científico", enumera. Distingue entre diseño, desarrollo y arte a la hora de hablar de las salidas laborales a través del proceso de creación de videojuegos. "La parte de diseño ha sido la más maltratada tradicionalmente, especialmente en el contexto laboral español, pero cada vez más se requiere de profesionales especializados en el proceso de creación del contenido que va a encapsular el juego o la app", considera.

La rama del desarrollo, la más "técnica" para este experto, es donde tiene cabida el rol del programador "y todo lo relacionado con programación orientada a objetos, redes y servidores, así como inteligencia artificial", apunta, sin querer dejar de lado la rama artística, con los encargados de "vestir" el juego o la aplicación.

"Más allá de estas tres ramas principales, conforme las industrias de creación de videojuegos y apps 3D van evolucionando, son necesarios muchos profesionales de otros perfiles, desde comunicación y marketing, pasando por perfiles empresariales o financieros y hasta jurídicos", señala. De ahí que aplauda la alta demanda que existe actualmente tanto de formación como en el mercado laboral. "Interés hay, incluso en ciudades pequeñas como Zamora, y la variedad de empresa involucradas es cada vez mayor", subraya, después de años participando en la AEVI, donde hay asociados de todo tipo, "desde estudios de diseño y desarrollo hasta compañías distribuidoras, universidades, centros de formación o empresas relacionadas con subsectores de diseño de apps interactivas o videojuegos. Así que tanto la tipología de empresas involucradas como los perfiles laborales son muy variados", apunta.

Pero también quiere dejar claro que "aunque salidas hay muchas, hay que ser cautos con los datos de empleabilidad. En concreto, el sector del videojuego es relativamente pequeño en España", por lo que muchos de esos diseñadores, desarrolladores y artistas miren a empresas fuera del país, "algo cada vez más accesible por el teletrabajo", señala.

Volviendo a los estudios que se imparten en el Campus Viriato, "están orientado a formar profesionales capacitados para trabajar en los sectores de las aplicaciones interactivas y de los videojuegos, con un perfil de programación y desarrollo de aplicaciones 3D y un perfil técnico desde el punto de vista de la ingeniería y de la arquitectura", explica. Esto hace que el campus zamorano sea "idóneo", puesto que cuenta con casi todos los recursos materiales y docentes.

La mayoría de los estudiantes que han accedido a estos estudios lo han hecho desde Bachillerato o ciclos de FP y será a partir del próximo curso cuando se puedan realizar las prácticas de empresa, ya que son optativas en cuarto. "En cuanto a las características socioeconómicas de la zona de influencia del título, se puede reseñar que el entorno más cercano, la ciudad y la provincia de Zamora, cuenta con pocas empresas específicas del sector del so videojuegos o similares" reconoce, "pero sí que cuenta con bastantes empresas de fabricación o servicios que pueden llegar a ser fuente de empleos o prácticas. Quizá la existencia de un grado de este tipo sirva de revulsivo para la creación o la atracción de otras empresas a la ciudad", apunta.