El alcalde de Zamora reclama al nuevo ministro de Cultura que compense los seis años de retraso en la rehabilitación de la muralla

El alcalde de Zamora, Francisco Guarido, ha mandado un recado al nuevo ministro de Cultura, Ernest Urtasun, de Sumar, al que ha exigido que el Ministerio en este nuevo mandato se dedique menos a salir en prensa por ello y más a la financiación del proyecto para rehabilitar la muralla medieval de la ciudad en el tramo de la avenida de la Feria, una actuación que, según recordó el máximo responsable municipal, lleva seis años sin acometerse. En base a ello ha reclamado que frente al presupuesto inicial de 1,7 millones de euros se incremente esa dotación económica comprometida para el arreglo de la fortificación medieval. Por el momento, Guarido está a la espera de que se complete el nuevo organigrama ministerial para trasladar esa petición al nuevo responsable del área que lleva a cabo ese tipo de actuaciones dentro del Ministerio.

Por otra parte, Guarido dio cuenta de una resolución judicial que desbloquea los últimos derribos de la actual fase del plan de expropiaciones para despejar de edificios anexos la muralla a la altura de la avenida de la Feria. El juzgado ha dejado sin efecto una medida cautelar que impedía acometer ese derribo que permitirá liberar otros 50 metros lineales de muralla para que sean visible desde extramuros.

Los últimos edificios que había expropiado el Ayuntamiento, de los números 43, 45, 47 y 49 de la avenida de la Feria, no se habían podido derribar hasta ahora, tras un año y nueve meses de trámites judiciales, debido al recurso de una de las empresas que fue excluida de la licitación municipal de las obras de derribo.

El juzgado ha dado ahora la razón al Consistorio zamorano y ha levantado la medida que impedía la demolición de cuatro inmuebles adquiridos por el Ayuntamiento y situados en los números de la avenida de la Feria más próximos a la bajada de San Martín. Los edificios estaban cerrados y su derribo paralizado desde marzo de 2022, lo que representaba un peligro para la seguridad, por su estado de conservación, algo que ha alegado el municipio y que el juzgado ha tenido en cuenta para levantar la prohibición de derribarlos.

De esta forma, las previsiones municipales apuntan a que tras las fiestas navideñas puedan iniciarse los trabajos para despejar ese tramo de muralla. La empresa que resultó adjudicataria se ha comprometido a llevarlos a cabo al mismo precio de la licitación, pese a que ha pasado más de un año y medio y legalmente podía renunciar, lo que hubiera retrasado la actuación al ser necesario en ese caso un nuevo proceso de licitación. Ahora solo falta adjudicar la dirección de obra con el fin de que a principios de año pueda llevarse a cabo el derribo de esos cuatro inmuebles que fueron adquiridos por el Consistorio algo más de 800.000 euros.

Una vez despejado ese nuevo paño de muralla, el Ayuntamiento tendrá vía libre para acometer el próximo año el ajardinamiento de la zona en un proyecto que supondrá una inversión de otros 800.000 euros financiados con fondos europeos . Esa actuación conllevará también el derribo de parte de la atarjea de Segundo Viloria de la antigua canalización de la ciudad, que divide la zona liberada en dos. El Ayuntamiento pretende conservar únicamente un trozo testimonial de la canalización situado junto a la acera de la avenida de la Feria. Para ello, se dirigirá a Patrimonio para solicitar la retirada de parte de la atarjea, en consonancia con lo que ha autorizado la Comisión de Patrimonio de Zamora para esa misma infraestructura de abastecimiento en el solar del futuro Museo de Semana Santa.

De forma paralela, el Ayuntamiento acometerá próximamente el derribo del edificio de tres alturas de la calle Postigo, situado junto a la puerta de la Lealtad.

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