Empotra su vehículo contra una pared en Zamora al multiplicar por cinco la tasa de alcoholemia permitida

Se puede decir que el conductor del vehículo que se empotró contra una pared en la calle de Sampiro iba ciego por el consumo de alcohol, ya que excedió con creces el mínimo permitido por la legislación, los 0,25 miligramos por litro de aire: cinco veces más. Al parecer, no hubo que lamentar heridos graves en el accidente de tráfico registrado en el barrio de La Lana el último día festivo de este largo puente, según fuentes consultadas por este periódico.

Lo que sí se ha podido confirmar es que en el control al que la Policía Municipal sometió al varón que iba al volante se comprobó que circulaba muy afectado por el consumo de alcohol. En concreto, arrojó una tasa de 1,23 miligramos por litro de aire aspirado, muy por encima de la permitida por la Ley de Seguridad Vial.

El accidente, en el que el varón colisionó de frente contra la pared de un inmueble de la calle de Sampiro, se registró hacia las 23.39 horas de este 10 de diciembre. A esa hora, los agentes municipales estaban realizando uno de los muchos controles de alcoholemia programados de forma preventiva para evitar que las personas que hubieran consumido bebidas alcohólicas se pusieran al volante.

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En estos casos, el conductor acaba detenido y pasa a disposición judicial al Juzgado de Guardia, donde se le toma declaración antes de darle la oportunidad para que asista a un juicio rápido en el que, si se conforma con la pena y la multa que le solicita la Fiscalía de Tráfico, puede evitar que su caso llegue al Juzgado de lo Penal, donde la pena será mucho más dura.

La condena, en este caso, oscila entre tres y seis meses de prisión; de seis a doce meses de multas económicas o de trabajos en beneficio para la comunidad; y a la pérdida del permiso de conducir durante un período de uno a cuatro años.

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