La parcela de Baco en la tierra

La Ruta del Vino de Zamora muestra músculo y una oferta que incluye bodegas, queserías, restaurantes, enotecas, cultura y deporte

Degustación de productos de la Ruta del Vino de Zamora.

Degustación de productos de la Ruta del Vino de Zamora. / Jose Luis Fernández

Luis Garrido

Luis Garrido

Conocer la historia a través de las diferentes manifestaciones artísticas, descubrir las bodegas tradicionales de elaboración de vino, disfrutar del mejor queso de la tierra y recorrer el paisaje tradicional que combina los campos de cereal con los centenarios viñedos de la Tierra del Vino. Todo eso se puede realizar siguiendo la Ruta del Vino de Zamora, que en la jornada de ayer vivió su puesta de largo en la terraza del Teatro Ramos Carrión tras cerca de dos años de funcionamiento. La experiencia es un viaje para los cinco sentidos con el enoturismo como pilar central. Una propuesta que ayer conocieron de primera mano los zamoranos que pudieron asistir a su presentación en medio de estas Ferias y Fiestas de San Pedro.

Ramiro Morán, presidente de la Ruta del Vino de Zamora, ha defendido al enoturismo como un sector con futuro en tiempos de incertidumbre. "La gente cada vez más se desplaza en busca de experiencias, para conocer territorios con un hilo conductor que, en nuestro caso, es el vino", ha señalado durante la presentación en la terraza del Teatro Ramos Carrión. "Nosotros estamos inmersos en diferentes proyectos junto con el Ayuntamiento de Zamora, la Diputación Provincial y la Junta de Castilla y León; con ellos vamos a las principales ferias como Intur, Fitur y Naturcyl, pero además estamos en un importante proyecto a nivel nacional de desarrollo turístico", ha comentado.

La Ruta del Vino de Zamora obtuvo la certificación de Rutas del Vino de España el 20 de septiembre de 2021, y su ámbito geográfico de actuación coincide con el de la Denominación de Origen Tierra del Vino de Zamora, por lo que la oferta es muy completa, al incluir tanto una ciudad como Zamora, bien comunicada y llena de servicios, como otros 55 municipios rurales con una gran riqueza paisajística y cultural, 45 de ellos en la provincia de Zamora y 10 en la zona limítrofe de la vecina provincia de Salamanca.

Entre los objetivos de la Ruta del Vino de Zamora, está promocionar todo el potencial del turismo en esos pueblos, con un enfoque ecosistémico, para ofrecer nuevas oportunidades laborales a los habitantes de este territorio y asentar población en el medio rural, una tarea para cual cuentan con el apoyo del Patronato de Turismo de la Diputación de Zamora y de la Junta de Castilla y León. Así, la Ruta del Vino de Zamora se encarga de aunar toda la potencialidad de ese territorio para ofrecer packs turísticos completos, que van más allá del enoturismo, ofreciendo al visitante una experiencia integral para disfrutarla con los cinco sentidos.

La cartera de servicios que ofrece la Ruta del Vino de Zamora es prácticamente inabarcable, como así ha señalado Ramiro Morán. “Tenemos seis bodegas, alojamientos turísticos, enotecas, restaurantes, propuestas de ocio deportivo, oferta cultural e incluso un campo de golf como es el de El Maderal”, ha indicado. Todo ello está perfectamente indicado en la página web de la asociación, donde aparecen reseñas de los asociados que, además, pasan una auditoría cada dos años para obtener una mayor confianza por parte de los visitantes. Actualmente hay más de medio centenar de socios adheridos a la Ruta del Vino de Zamora, incluyendo instituciones públicas y empresas privadas. La inscripción está abierta para cualquier entidad que se quiera unir para posicionar su marca en esta ruta y formar parte de esta oferta turística integral.

Los zamoranos pudieron ayer aprender más sobre esta Ruta del Vino con una degustación en plena terraza del Teatro Ramos Carrión en el marco de las Ferias y Fiestas de San Pedro. Una oportunidad única para impregnarse de todo lo bueno que ofrece esta tierra.

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