Las pensiones de los zamoranos superan a los ingresos de los empleados jóvenes

La precarización de los salarios, más allá del repunte del sueldo base, lleva a los menores de 35 a ganar, de media, menos que los jubilados

Una mujer camina por las calles del centro de la ciudad.

Una mujer camina por las calles del centro de la ciudad. / Emilio Fraile

La precarización de los salarios en el sector privado y el incremento sostenido de las pensiones, con la consabida vinculación al IPC, ya han provocado que las prestaciones se sitúen por encima de los ingresos promedio que reciben algunos grupos de trabajadores. En el caso de Zamora, los empleados de entre 18 y 35 años ganan menos que la media de quienes ya han pasado al retiro, tienen una incapacidad permanente o reciben un subsidio por viudedad u orfandad. Esta circunstancia define bien algunos de los problemas que padece el mercado laboral.

Con los números concretos en la mano, se puede comprobar cómo los últimos datos de la Agencia Tributaria dejan patente que los 16.468 asalariados de la provincia que tienen entre 18 y 35 años ganan, de media, 12.883 al año. Esa cifra está por debajo del Salario Mínimo Interprofesional, lo que quiere decir que hay un grupo importante de personas que carece de un empleo a jornada completa dentro de ese grupo etario.

Desde la última subida que se hizo efectiva en enero, las pensiones medias se han elevado a 1.008 euros de media al mes en Zamora, lo que, con las catorce pagas correspondientes, ofrece una cantidad promedio anual de 14.112. La diferencia se sitúa en unos 100 euros mensuales y expresa las dificultades que luego se perciben en las estadísticas a la hora de que los jóvenes se emancipen o adquieran una vivienda.

Además, conviene subrayar que la pensión media incluye a todas las personas que reciben la prestación. Si se acude sólo a los ingresos por jubilación, el promedio de ganancias se eleva de forma palpable en la provincia hasta los 1.143 euros al mes. Es decir, 16.002 euros al año. Esa cantidad supera a la que recibe ya el grupo de 26 a 35 años, que está mejor retribuido que la horquilla más joven, pero que no alcanza esos datos.

Una manifestación sindical organizada en Zamora en 2022. | Ana Burrieza

Una manifestación sindical organizada en Zamora en 2022. | Ana Burrieza / Manuel Herrera

En realidad, esos 1.143 euros al mes se colocan por encima de las tablas salariales para un buen puñado de puestos en convenios como el de la hostelería o el comercio. En este último, el acuerdo sellado hasta el 2026 deja en el sueldo base a tres de las cinco categorías de trabajadores que se especifican. Todos ellos seguirán cobrando, al menos durante este ejercicio, 1.080 euros por nómina y una hipotética subida dependerá de si el SMI se incrementa desde el Gobierno de España.

En estos momentos, según los datos de la Seguridad Social, hay en torno a 14.000 pensionistas que ganan más que esos 1.080 euros por paga. En concreto, 13.785 personas se sitúan en la horquilla que va del Salario Mínimo Interprofesional a la pensión máxima. A finales del 2021, 24.000 empleados zamoranos ganaban lo mismo o menos que el sueldo base, con las cifras de la Agencia Tributaria.

Por otro lado, las estadísticas oficiales revelan igualmente que hay 1.114 zamoranos, dos tercios de ellos varones, que ganan el equivalente a la pensión máxima. Es decir, los 3.058 euros mensuales en los que se ha fijado recientemente esa prestación tope. Huelga decir que tal cantidad rebasa con holgura el sueldo medio de la provincia. De hecho, prácticamente lo duplica.

Ahora, en Zamora hay 47.798 pensionistas que acumulan unos ingresos anuales en torno a los 675 millones de euros. Los 61.704 trabajadores de la provincia se embolsaron en 2021 aproximadamente 1.127 millones, de nuevo según los datos de la Agencia Tributaria, que revelan que los emolumentos de los varones de más edad tienden a ser los más elevados.

Por citar un par de casos que ilustran las diferencias, los hombres de entre 56 y 65 años que trabajan como asalariados en la provincia ganan, de media, 22.811 euros anuales. Las mujeres de entre 26 y 35 que están empleadas por cuenta ajena se embolsan 14.557.

La pérdida de poder adquisitivo, una evidencia tras un año de inflación desbocada

La pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores zamoranos es una evidencia tras el año de inflación desbocada que ha sufrido la provincia y una subida salarial que no ha ido acorde con ese incremento de los costes. Según las cifras del Ministerio de Trabajo, los convenios colectivos sellados en Zamora durante el 2022 implicaron un repunte medio del 2,46% en los salarios de los trabajadores, mientras que el alza de los precios superó ampliamente el 8%. Los alimentos han sido, además, los grandes protagonistas de un aumento de los costes muy lesivo para las carteras de los ciudadanos, especialmente en Zamora, donde un buen número de personas se maneja en cifras cercanas al salario base o incluso por debajo, si se trata de contratos de media jornada.

Además, dos tercios de los ciudadanos se ubican por debajo de los 1.500 mensuales. El salario medio anual entre los trabajadores de Zamora era, al cierre de 2021, de 18.270 euros, por lo que, si se toma en cuenta la inflación acumulada en 2022, y la subida de sueldos aprobada en la negociación colectiva, se puede concluir que el balance arroja una pérdida aproximada de poder adquisitivo de mil euros anuales para los empleados de la provincia, que iniciaron el 2023 con esa rémora y con el temor de que los sobrecostes siguieran por encima de los incrementos salariales sellados de cara a los futuros ejercicios, como ha ido ocurriendo en el arranque del curso.

Suscríbete para seguir leyendo