XXVI Ciclo Flamenco del Teatro Principal

La Fabi dio calor a la fría noche zamorana

De izda. a dcha. Ángel Fernández, Manuel Zambullo, La Fabi y Curro Carrasco| FRL

De izda. a dcha. Ángel Fernández, Manuel Zambullo, La Fabi y Curro Carrasco| FRL / Félix Rodríguez Lozano

Félix Rodríguez Lozano

Con un aforo de más de tres cuartos de entrada y asistentes muy entregados, tuvo lugar el primer concierto de este Ciclo en el que las cuatro protagonistas son féminas. Para que luego quede alguno, todavía, que ponga en cuestión la importancia esencial de la mujer en el flamenco. Baste recordar una docena de cantaoras -y no entro en el capítulo de baile, donde antes y ahora son una pléyade de enormes artistas- cantaoras míticas en la historia del universal arte, tanto por sus creaciones como por sus magistrales interpretaciones: María Borrico, creadora de la seguiriya de cambio más espectacular de cuantas se hayan originado, La Andonda artífice de la soleá de Triana y compositora de tres, La Serneta, única creadora -incluyendo hombres- que hayan engendrado siete soleares, Anilla la de Ronda, que además se acompañaba así misma al ser una destacadísima tocaora (caso similar al actual Ricardo Fernández del Moral) Niña de Los Peines, La Perla, La Piriñaca, La Paquera, La Sayago o María Vargas, única que aún vive y está en plenitud de facultades. Casi nada.

La Fabi dio calor a la fría noche zamorana

La Fabi dio calor a la fría noche zamorana / Félix Rodríguez Lozano

La Fabi no está en ese florido ramillete, pero destaca sobre muchas otras en el momento actual.

Abre, acompañada únicamente por Curro Carrasco -hermano de Juañares, sobrino de Diego Carrasco y fundador e integrante de Navajita Plateá- su guitarrista habitual, para hacer tres cantes minero levantinos, muy en su línea personal: taranta, cartagenera y levantica. Muy aplaudidos de inicio.

Salen los palmeros, Manuel Zambullo y Ángel Fernández, para interpretar “… cantes de mi tierra” (La Fabi es de Arcos de La Frontera). Alegrías muy valientes.

Siguen por tientos cerrados por tangos, en estos se acordó de Pastora, de Extremadura y de Camarón, con referencia al de La Isla en la última copla.

Se retiran los palmeros para abordar el palo rey, las seguiriyas. Abren por dos de Cádiz, Francisco La Perla y Enrique El Mellizo para cerrar por Jerez con la trágica de El Manijero en versión de Tía Anica La Piriñaca. Aplausos a raudales.

Continúan por fandangos, muy jerezanos, acordándose de Camarón y de Chocolate.

Aparecen nuevamente los palmeros para finalizar por bulerías, incluyendo las más floridas de La Plazuela, canción por bulerías y temporera por el mismo compás. En todas las coplas, varias de ellas fuera de micrófono, acompañadas de esa majestuosa patadita que la Fabi sabe dar.

Se cierra la atrayente velada con un prolongado y sonoro aplauso que dejó bien clara su comunión con el público. Sería muy deseable que La Fabi vuelva a Zamora en breve.

Próximo jueves otro plato fuerte con Mayte Martín.