Zamora necesita proyectos. Ni palabras, ni estudios, ni buenas intenciones. Tan solo, proyectos. Y todos tienen nombre y apellidos, por lo que únicamente falta que las instituciones competentes apuesten decididamente por convertirlos en realidad. El foro “Razones para quedarnos II. Reto demográfico y cooperación transfronteriza” celebrado ayer en la capital puso estas iniciativas encima de la mesa. Y lo hizo frente al Gobierno y la Junta de Castilla y León, que son las administraciones que deben emplearse a fondo para revertir una situación demográfica que se lee con música de réquiem. La actitud es siempre positiva, pero es necesario abordar la problemática desde el trabajo. Y es ahí donde LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA ha querido poner el foco, organizando esta jornada con el patrocinio de Iberdrola, Diputación de Zamora, Grupo Dia, Caja Rural de Zamora, Ayuntamiento de Benavente, Ayuntamiento de Toro y con la colaboración de la Junta de Castilla y León y la Fundación Rei Afonso Henriques.
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Si no pudiste asistir o te quedaste con ganas de verlo al completo, aquí tienes el congreso íntegro retransmitido en directo por LA OPINIÓN DE ZAMORA:
Los proyectos
La recuperación del campamento militar de Monte la Reina, la conversión en autovía de la N-122 hasta Portugal, la construcción de la Braganza-Puebla de Sanabria, la biorrefinería de Barcial del Barco, el centro tecnológico en los terrenos de Renfe, la silver economy. Proyectos concretos “con nombre y apellidos”, como así defendió Cipriano García durante su intervención en la inauguración de la jornada. El director general de Caja Rural de Zamora puso el acento en la necesidad de que las administraciones públicas se impliquen en el desarrollo de estas iniciativas. Nada nuevo. Nada extravagante. Simplemente, materializar lo que se encuentra en la agenda desde hace años y que nadie hasta la fecha ha decidido ejecutar.
La reivindicación de Cipriano García fue directa al grano. Y lo hizo con dos destinatarios concretos que se encontraban en el patio de butacas. El secretario general para el Reto Demográfico, Francesc Boya, y el vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Francisco Igea, escucharon de boca del representante de la entidad de crédito que Zamora no puede aguantar más. “El deterioro que sufre este territorio es producto de décadas de falta de sensibilidad, pero la situación actual nos obliga a olvidarnos de lo que ha pasado y de repartir las culpas; debemos implicarnos, colaborar y tratar de arreglarlo”, expuso.
Una actitud compartida con el presidente de la Diputación Provincial de Zamora, Francisco José Requejo, quien intervino también en la inauguración de la jornada para tender su mano tanto al Gobierno como a la Junta de cara a convertir en realidad todos esos proyectos que desde hace años sobrevuelan por los despachos. “Lo que queremos es que de este foro de debate no salgan solo buenas palabras, sino que de aquí se deriven compromisos reales de actuación que ayuden, de una vez por todas, a revertir la situación en la que se encuentra la provincia de Zamora”, analizó el máximo representante de la Encarnación.
Por la parte que le toca, Requejo puso el foco en proyectos como la biorrefinería de Barcial o la silver economy, aunque se mostró un poco más beligerante a la hora de tratar el tema de Renfe y sus frecuencias con la provincia. “Necesitamos que el servicio entre Zamora y Madrid se declare de Obligación de Servicio Público. Y para eso es fundamental que las grandes instituciones quieran escuchar a las que nos encontramos más cerca de los ciudadanos, a quienes llegan las quejas de primera mano y a quienes no estamos apegados a los sillones y salimos a la calle”, alanceó el presidente.
El propio Requejo también participó en la mesa redonda que se abrió a continuación, con la presencia de Francesc Boya y Francisco Igea como representantes de los Gobiernos que deben ejecutar las políticas demográficas, y con la intervención de otras dos figuras vinculadas a la cooperación transfronteriza: la secretaria de Estado de Valorización del Interior, Isabel Ferreira, y el secretario general de la Fundación Rei Afonso Henriques, José Luis González Prada.
Aquí, las interpelaciones también se dirigieron especialmente a Boya e Igea, que intercambiaron pareceres con alguna discrepancia bien disimulada por su buen talante y que respondieron a las cuestiones directas trasladadas por González Prada y por Requejo. Antes, los cinco presentaron sus argumentos iniciales en base a la introducción de la moderadora, que fue la directora de LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA, Marisol López del Estal.
En su caso, Boya utilizó esa intervención para dibujar un escenario incierto, pero esperanzador, con una ventana de oportunidad que también detectó Igea, especialmente preocupado por la fiscalidad. El vicepresidente de la Junta apoyó la necesidad de que Zamora cuente con un estatus específico que le permita ofrecer incentivos a las empresas en su territorio.
Por su parte, Ferreira y Prada abordaron cuestiones vinculadas a la relación entre España y Portugal, mientras que Requejo, también implicado en el asunto de la fiscalidad, regresó a los datos y se apoyó en las metáforas: “Queremos mover el árbol de la despoblación y que las nueces se queden en Zamora”, advirtió.
Unidad en la batalla
Ya en la arena del debate, Boya e Igea coincidieron en la importancia de unir fuerzas para batallar contra la despoblación. Eso sí, ambos evitaron realizar anuncios concretos, contra lo que demandaban los representantes zamoranos. El vicepresidente de la Junta sí citó alguna cuestión ya conocida como la conexión entre Puebla y Braganza, que depende de su Gobierno, pero lo hizo de pasada.
Nuevamente, Requejo y Prada aludieron a la necesidad de ir al grano. Incluso, el secretario general de la FRAH le planteó a Boya qué proyectos se deben elaborar para acceder a los fondos contra la despoblación, y le sacó a Igea el tema de los fondos Interreg que, camino de Zamora, terminan acomodándose en Valladolid. El secretario general para el Reto Demográfico respondió con la batería de temas que aparecen en las bases, de la eficiencia energética al turismo sostenible, pasando por ofrecer un papel protagonista a mujeres y jóvenes, y el vicepresidente autonómico esquivó la bala.
A partir de ahí, la discusión se desvió hacia asuntos relacionados con la energía, una cuestión que se encuentra ahora en el foco del debate, ante los proyectos fotovoltaicos que generan ciertos recelos en los pueblos; sobre todo por la incertidumbre acerca de su impacto económico positivo en las zonas donde se pretenden asentarse: “No puede volver a ocurrir lo que sucedió con los embalses, apuntó Igea, que aclaró que “el beneficio tiene que llegar” al territorio.
Monte la Reina
Por fin, en el tramo final, los ponentes abordaron una de esas cuestiones prioritarias para Zamora: la llegada de los batallones militares a Monte la Reina. La moderadora le preguntó directamente a Boya por el tema, y el secretario general para el Reto Demográfico vinculó el proyecto al proceso descentralizador que tiene en mente el Gobierno: “Hay que generar un nuevo modelo de país en el que haya policentrismo”, aseveró el dirigente gubernamental, sin mencionar plazos ni financiación. Solo confirmó que “el compromiso sigue siendo firme”, pero “hay algunas complejidades que se están resolviendo”.
Finalmente, y antes de las conclusiones, todos los ponentes pasaron de forma liviana por el tema de Portugal. Todos, menos Prada y, lógicamente, la propia Isabel Ferreira, que incidió en ello y que confirmó que el país luso “tiene todo el empeño para favorecer el desarrollo transfronterizo”. Boya recogió el guante y recalcó que la intención es “estrechar lazos” de la mano también de las instituciones locales: “No podemos vivir a espaldas de nuestros vecinos”, apostilló el responsable socialista.
En el cierre, Prada insistió en esa cuestión para pedir una mirada de largo alcance; Requejo reclamó que Zamora “no se olvide”; Ferreira aludió al peso de la digitalización; Igea tocó el tema de la igualdad de oportunidades; y Boya apostó por ofrecer razones para que la gente venga a estos territorios. Zamora clama por que esas razones tengan rostro y forma.
LAS INTERVENCIONES
Francisco Igea: "Fijar población no basta, debemos atraer gente como tierra de acogida"
Francesc Boya: "España tiene muchas ruralidades y cada una necesita su propia receta"
Francisco Requejo: "Tenemos emprendedores, pero les faltan condiciones y apoyo"
Cipriano García (Caja Rural): "Reclamamos un Plan Zamora de proyectos realistas y altura de miras"
Santiago Martínez (Grupo DIA): "Defendemos el modelo de franquicia para emprender en los pueblos"
Isabel Ferreira, secretaria de Estado en Portugal: "El empeño de nuestros gobiernos quedó patente en la última cumbre"
