El cinturón de castidad: mito o leyenda

Libros de la Edad Media.

Libros de la Edad Media. / P. I.

Mucho se habla, incluso en el lenguaje coloquial, del cinturón de castidad. Sin embargo, ¿es mito o existía realmente?

La respuesta correcta es la segunda. Se trata de un dispositivo que se utilizada en la Edad Media para "proteger" a los hombres de las infidelidades de las esposas. La pregunta que en la que probablemente estés pensando es: "¿Y cómo controlaban ellas a ellos?". La respuesta ya la sabes... era la Edad Media. Se utilizaba solo en Europa y hay apuntes históricos que aluden a la existencia de este cinturón desde la Antigüedad. También era utilizado como medida de protección de la virginidad de las mujeres.

De metal y con llave

Su diseño es muy básico y no es más que una especie de correa o cinturón metálico ajustado alrededor de la cintura y de los genitales para impedir el acceso sexual. Contaba con una pequeña abertura para permitir las necesidades fisiológicas de la mujer. Tenía también una llave que tenía el esposo o el padre, es decir, cualquier figura masculina de autoridad.

Obviamente, su uso es inexistente aunque se utiliza -la palabra- en contextos contemporáneos como un símbolo de la opresión o también como fetiche en algunas prácticas sexuales o representaciones artísticas, pero siempre lejos de su función original.

Para hombres: más modernos

En el escaparate de una céntrica tienda de Nairobi, un maniquí desnudo luce un caparazón metálico que encierra sus genitales bajo llave: es el polémico cinturón de castidad para hombres que se ha empezado a comercializar con el pretexto de proteger a los kenianos de sus mujeres.

Este calzoncillo de hierro que se cierra con un candado de "extrema seguridad" encontró su sitio entre trajes, camisas y corbatas tras conocerse el caso de una mujer en Nyeri (centro de Kenia) que le había cortado el pene a su marido como venganza por una infidelidad.

El éxito de este invento todavía es dudoso, ya que parece poco probable que el incidente de Nyemi se convierta en una preocupación real y generalizada entre los kenianos.