Los conqueros hacen historia

Jueves Santo en Toro. Y con este día, uno de los momentos singulares de la Semana Santa.

A las 12.00 en punto del mediodía la Cofradía de Jesús Nazareno y Ánimas de la Campanilla renueva una de las tradiciones y ritos más arraigados: la bendición de los conqueros o "cagalentejas" que por primera vez en la historia tienen entre sus filas a una mujer, Sonia Gato.

Ante la imagen de Nuestro Padre Jesús, ella y otros tres postulantes fueron los cuatro conqueros bendecidos en una ceremonia solemne celebrada en el atrio de la iglesia de Santa María de Roncesvalles y Santa Catalina, cuyo entorno volvió a llenarse de fieles y curiosos para ser testigos de uno de los rituales más antiguos y significativos de la Pasión toresana.

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Devoción y recogimiento caracterizan a este Jueves Santo luminoso y plenamente normalizado tras los años de pandemia. El toque de la corneta anunció el inicio de la ceremonia, con abades, escribanos y postulantes preparados para la bendición, que comenzó con un rezo conjunto seguido de las palabras a los cuatro conqueros, a quienes se encomienda el cometido de pedir limosna en nombre de Nuestro Padre Jesús a lo largo y ancho de las calles de la ciudad. Los donativos se destinarán a sufragar los gastos de la cofradía.

Momentos de emoción en el recuerdos a los seres queridos ya fallecidos que, generación tras generación, han perpetuado esta ceremonia religiosa las lágrimas en el preciso momento. En la bendición, los conqueros hicieron el juramento de silencio durante la petición de limosnas y, ayudados por los escribanos, taparon su rostro con el capirote para preservar su anonimato, además de recibir las insignias (varas) con las que realizan el recorrido. La Cofradía de Jesús Nazareno y Ánimas de la Campanilla sale mañana en solemne procesión por las calles de Toro.