Zamoreando

Ya son ganas

Pilar Rahola no tiene categoría para poder ofender al rey Felipe VI

Carmen Ferreras

Carmen Ferreras

Sí, ya son ganas de insultar sin venir a cuento, ya son ganas de malmeter, ya son ganas de incordiar y ofender. Eso se le da bien a Pilar Rahola, cada vez más soberbia y más insultante para con España, la monarquía, los españoles, nuestros símbolos y todo aquello que huela o sepa a España, incluido el cocido madrileño, Rahola prefiere la escudella catalana.

Estimo que para decir que no está de acuerdo con la monarquía y que le sobrepasa, basta con decirlo, sin necesidad de llamar al rey de España, Cataluña incluida, que, además, es el jefe del Estado, con el despectivo nombre de "reyezuelo". Y por si fuera poco, esta desvergonzada que sólo tiene lengua de la que vive muy bien, gracias a las televisiones que la contratan, ha arremetido duramente contra la princesa Leonor, futura reina de España, a la que ha llamado "pobre niña de mal gusto". Afortunadamente, no ofende quien quiere, sino quien puede y la Rahola no tiene categoría.

Esta vez, volvió a lanzar sus soflamas insultantes y separatistas en ese vertedero en el que los de la independencia han convertido a la televisión pública catalana. Vertedero en el que lo mismo se insulta y falta al respeto a cualquier institución española, que hacen sangre de la Casa Real, de la primera Familia de España, siempre en el punto de mira de la mayoría de invitados de TV3.

El prime time del pasado sábado tuvo como estrella invitada a la Rahola quien dedicó una lluvia de insultos a la monarquía española, compartiendo momento estelar con Pilar Eyre, que no sé yo. Rahola es íntima amiga de Puigdemont y no ha desaprovechado un solo segundo para mostrar su nula educación y falta de respeto. Ya son ganas de hacer daño sin que venga a cuento. Y todo a causa de la jura de la Constitución protagonizada por la Princesa de Asturias. Eso también puede considerarse envidia porque, en el fondo a la Rahola le gustaría protagonizar portadas, espacios de televisión de más categoría que aquellos a los que acude y, obviamente, los telediarios y programas especiales. Pero, va a ser que no.

Con esta gente que nos odia, que odia a España y todo lo que representa es con la que se quiere pactar, con la que se están dando pasos de gigante por un puñetero sillón en La Moncloa. Resulta difícil y fácil de entender a la vez. La independentista se descolgó diciendo, entre otras barbaridades, que se intenta "blanquear" al rey y a toda su familia. No. Lo que en verdad se está blanqueando es a los que a punto estuvieron de perpetrar un golpe de Estado, a todos esos individuos de apellido inequívocamente catalán que le echaron un pulso al Estado y lo perdieron. A esa es a la gente que se está intentando blanquear.

Hay un dicho que reza: "Si dicen, que dizan, mientras no hazan". Lo malo es que dijeron e hicieron. Los del hecho diferencial, los del supremacismo con cartera andorrana, como la propia Rahola, hace tiempo que producen hartazgo entre los españoles.

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