Balonmano

Sergio Navarro, segundo entrenador del Balonmano Zamora: "Hay que trabajar, no queda otra"

"Seguimos sin encontrar ese ritmo de partido que nos vaya bien", comentó el técnico

C. T.

Sergio Navarro, segundo entrenador del Balonmano Zamora Enamora, atendió a los medios de comunicación tras el encuentro disputado por la formación pistacho ante el UBU San Pablo debido a la indisposición de Fran González, quien hizo un esfuerzo por estar en el banquillo durante la contienda.

Navarro señaló que la derrota zamorana llegó ante "un equipo que está muy bien trabajado, con muy buenos jugadores" y que, pese a contar el cuadro local "también con buenos jugadores", su equipo "todavía no ha conseguido encontrar ese ritmo de partido que vaya bien, ese juego en ataque eficaz y ese engranaje en defensa que empieza a encajar y vale para que no lleguen goles con tanta facilidad". "No estamos todavía en ese momento y no queda otra que trabajar, trabajar y trabajar para ponernos al ritmo del resto de equipos y empezar a competir los sesenta minutos".

El segundo entrenador analizó el choque y subrayó que se tuvo "un buen inicio, con cinco primeros minutos de mucha calidad" pero, después, "hubo un bajón claro". "Lo que tenemos que analizar es qué ha pasado para tener esos buenos cinco minutos y qué ha ocurrido después para tener ese bajón, que no se repita y el equipo se descuelgue en el marcador", comentaba Navarro, siendo consciente de que los males zamoranos se centran en un tema colectivo.

El técnico no dudó en afirmar que, en cada partido, hay buenas individualidades, pero que Balonmano Zamora Enamora debe dar un paso más en sus prestaciones, sin depender de actuaciones como las firmadas el sábado por Doval y Costas. "En el caso de Víctor en portería, está brillando de forma continuada y rinde a un buen nivel, mientras que en ataque es verdad que hay que jugadores que brillan más en cada partido. Lo importante es que hay que trabajar para que los que brillen sean tres o cuatro jugadores, los podamos juntar no dependamos de que alguien marque 12 goles. Principalmente, porque los que meten 12 también fallan tres o cuatro y si dependemos solo de ellos, tenemos un problema".

Por último, en cuanto a la escasa participación de los extremos pese a sus números de cara a gol y las quejas desde la grada por los ataques continuados por el centro de la zaga rival, Navarro indicó que es un problema "que no solo lo dice la grada, también el banquillo y los propios jugadores". "Ese no es tema de palabra, es de trabajo y de acostumbrarnos a que la bola llegue a los extremos también los lunes, martes miércoles, jueves y viernes. Entonces, los sábados, llegará la bola al extremo; mientras tanto, hay que trabajarlo, trabajarlo y trabajarlo. No hay otra".