Benavente asume la elaboración de un Plan de gestión de residuos urbanos

Los benaventanos produjeron en 2022 algo más de 17 toneladas de basura orgánica cada día; 86 kilos diarios de enseres y objetos voluminosos; 729 kilos de envases de plástico y similares; 972 kilos de papel y cartón; y 608 kilos de vidrio (este dato es de 2021).

Para hacerse una idea de lo que implica la generación de este volumen de residuos, la ciencia establece que una tonelada de desechos orgánicos enviada a un vertedero equivale a 4,2 toneladas de CO2.

Así, el pasado año los benaventanos fueron responsables (sin contar el impacto del vidrio, el cartón y el papel, el plástico y otro tipo de restos) de la generación de 26.111 toneladas de dióxido de carbono, el gas vinculado al efecto invernadero y una de las principales causas del calentamiento global y del cambio climático.

Desde su entrada en vigor en 2014, Benavente ha seguido en materia de residuos las directrices del Plan Integral de Residuos de Castilla y León (PIRCYL), pero ya no es suficiente.

Así lo acaba de hacer notar la Oficina del Procurador del Común a los ayuntamientos con más población de la región, a los que ha solicitado informes pormenorizados sobre la generación y recogida de residuos urbanos en cada municipio y la necesidad de cumplir con la nueva normativa legal.

Benavente, que dispone tan solo de una ordenanza que tendrán que ser modificada más pronto que tarde, acaba de finalizar este informe en el que asume la necesidad de cumplir con la nueva Ley de residuos y suelos contaminados para una economía circular, aprobada en abril de 2022. Por ello redactará un Plan municipal para la prevención y gestión de residuos urbanos del que carece a fecha de hoy.

Este futuro plan "servirá para establecer las directrices y medidas necesarias y garantizar la adecuación de los circuitos de recogida". Su finalidad será "contribuir a lograr los objetivos de reducción establecidos, primando la prevención en la generación de los residuos y sus impactos sobre el medio ambiente".

El Plan describirá las medidas de prevención en la generación de residuos domésticos que depende de una serie de factores, entre ellas el grado de concienciación ciudadana y las infraestructuras de tratamiento.

"Esta política de prevención solo tendrá éxito en la medida que haya una implicación activa de todos los agentes y la evaluación de los sistemas de recogida separada", indica el informe redactado por los técnicos del área municipal de Medio Ambiente.

En Benavente se efectúa desde hace años la recogida separada de envases ligeros, papel y cartón y vidrio, que suponen la mayor cantidad de residuos urbanos generadas en la ciudad. También los residuos de podas de parques y jardines, y los residuos procedentes limpieza viaria y comerciales.

Del mismo modo se recogen por separado aceites y grasas vegetales usados, residuos textiles y residuos peligrosos domésticos, además, de residuos voluminosos, residuos de aparatos eléctricos y electrónicos, pilas y residuos de demolición procedentes de obras menores, y, por último, se ofrece un servicio de recogida de cadáveres de animales.

Modificación de la Ordenanza Cívica

El informe, que detalla el número exacto de contenedores para cada recogida específica de residuos, hace hincapié en la necesidad de adaptar la ordenanza municipal a la nueva ley. El capítulo cuarto de la Ordenanza Cívica hace mención expresa a la limpieza de la red viaria y otros espacios libres, edificios y mobiliario; a la recogida selectiva de cada tipo de residuos; al depósito de las distintas fracciones en cada tipo de contenedor: y al depósito en los puntos limpios.

El texto deberá adaptarse ahora a las nuevas obligaciones relativas a la recogida y gestión de los nuevos flujos de residuo. Deberá incluir disposiciones específicas en cuanto a la recogida separada de residuos de competencia municipal, señalando con claridad y en cada uno de los casos el lugar y forma en la que los ciudadanos deben depositar los mismos, y el régimen sancionador aplicable a los posibles incumplimientos. Esta es otra tarea por realizar mientras se afronta la redacción del Plan.

El documento detallado solicitado por el Procurador del Común refiere también el tratamiento de los residuos domésticos considerados peligrosos en los puntos limpios, y confirma la apuesta por nuevas campañas de concienciación. La última realizada se centró en la gestión sostenible de los recursos y los residuos con motivo de la “Semana Europea de la Reducción de Residuos (EWWR).

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