Nueva alerta de los ganaderos de vacuno por bajada de la leche

La Asociación Láctea Empresarial (OPL) considera "injustificada la oferta a la baja para la leche de sus socios". Ganaderos de vacuno de leche de Castilla y León e industrias lácteas se encuentran inmersos en una nueva negociación de contratos para el próximo trimestre (abril-junio).

Tras los primeros contactos, anuncia bajadas generalizadas en el precio de 30 euros por tonelada, algo "desproporcionado y a lo que nos oponemos firmemente". Apuntan que "este nuevo intento de bajada se fundamenta principalmente en un exceso de producción de leche, en una disminución del consumo de productos lácteos, y en la entrada de leche y derivados desde otros países comunitarios a precios inferiores a los del mercado nacional, que entran en competencia con la de nuestros ganaderos".

España cerró 2.023 con una producción similar a la del año 2.022. Por el contrario, en Castilla y León volvió a caer esa producción por segundo año consecutivo y con una tasa de abandono de explotaciones del 8%, cifra superior a la media nacional.

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Los datos de este comienzo de 2.024 van en la misma línea a los expuestos anteriormente. Por tanto, "en caso de que se impongan estas bajadas, estaríamos empujando a los productores de leche de vaca de Castilla y León a continuar en la senda del cierre de granjas y de disminución de censos, una región que desde 2.015 años ha perdido el 53% de sus granjas y que terminó el pasado año con unos 700 ganaderos con entregas declaradas".

En medio de las actuales negociaciones, la OPL “Asociación Láctea Empresarial” alza la voz en defensa de sus productores de leche y reitera que no está justificado este anuncio de bajada tan desproporcionada, exigiendo a las industrias que reconsideren su postura.

"Volvemos a incidir como en anteriores negociaciones en la duración de los contratos, es un aspecto fundamental que va más allá de la simple formalidad. Abogamos por acuerdos contractuales que permitan a nuestros ganaderos planificar sus operaciones agrícolas a medio y largo plazo. Esta planificación es esencial para la estabilidad de las granjas y la eficiencia en la organización del trabajo, contribuyendo así al desarrollo sostenible de la industria láctea".

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