El aprovechamiento de la jara, un gran potencial en Zamora

El Colegio Universitario acoge el 14 de marzo una jornada sobre un matorral que contribuye a la prevención de incendios y tiene su mayor posibilidad industrial en los aceites esenciales y la biomasa

Flores de jara.

Flores de jara. / Cedida

T. S. R.

T. S. R.

El mayor potencial industrial de la jara se orienta hacia los aceites esenciales y la biomasa primaria. Un recurso en el que destaca Zamora, sobre todo el oeste de la provincia, en un país que tiene la mayor superficie de esta planta en todo el mundo. Una jornada explicará el 14 de marzo las potencialidades de su aprovechamiento.

Será en la Sala de Conferencias del Colegio Universitario de Zamora - UNED, donde el grupo operativo de innovación Es Jara presentará el desarrollo del proyecto, en una interesante cita para que los propietarios forestales, empresas del sector e interesados obtengan más información sobre este recurso de grandes posibilidades en la provincia. Zamora lidera el posible potencial productor, sobre todo Aliste, comarca que representa casi el 24% del total de la superficie de jarales.

La iniciativa pretende mejorar los aprovechamientos de estos matorrales a través del impulso y renovación de la cadena de valor de las jaras. ESjara afronta el reto científico-técnico de aportar aprovechamiento, riqueza económica y gestión forestal sostenible al desarrollo de la bioeconomía en las zonas rurales, generando un rendimiento económico a los propietarios forestales y contribuyendo a la lucha frente al cambio climático y la prevención de incendios en matorrales de especies de cistus.

El proyecto está coordinado por la Fundación Centro de Servicios y Promoción Forestal y de su Industria de Castilla y León (Cesefor).

Los jarales de Cistus ladanifer (jara pringosa) ocupan más de 3,5 millones de hectáreas en España. Pero se explotan menos de 30.000 hectáreas, en una pequeña parte del suroeste de Andalucía.

ESjara tiene por finalidad desarrollar el potencial de obtención de derivados de las jaras, en especial aceites esenciales, y pretende extender esta actividad a todo el ámbito de distribución de los jarales, actualmente en situación de abandono en el territorio nacional.

Entre los objetivos del proyecto está la modernización de la actividad de recolección de la jara, hasta ahora manual y rudimentaria, por medio de la mecanización de la cosecha.

También, la transformación de toda la cadena de valor a través de la implantación de herramientas y métodos de teledetección, digitalización y trazabilidad. Y el incremento del valor añadido de la explotación de la jara mediante la identificación de nuevas aplicaciones de sus productos y de la valorización de los subproductos del aceite esencial, como son el hidrolato y la biomasa residual.

ESjara es un proyecto innovador en el que participan, además, el Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (Ciemat), la cooperativa especializada en teledetección Agresta, la Federación de Asociaciones Forestales de Castilla y León (Fafcyle) junto con Asfoza, Asfobur y Fedehesa como miembros subcontratados; las empresas productoras de aceites esenciales Biolandes Andalucía y El Jarpil; y la biotecnológica Rooteco Agriculture. Colaboran la Dirección General de Patrimonio Natural y Política Forestal de la Junta de Castilla y León y la Consejería de Desarrollo Sostenible, Dirección General de Medio Natural y Biodiversidad de la Junta de Castilla-La Mancha.

Concedido por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, y dotado con una subvención de €casi 600.000 euros, el proyecto se desarrollará hasta marzo de 2025. ESjara obtuvo la mayor puntuación de los 23 aprobados en la convocatoria de proyectos de innovación de interés general por grupos operativos de la asociación europea para la innovación, en materia de productividad y sostenibilidad agrícolas.