Zamora, a la cabeza de la región en peticiones de una segunda opinión médica

Pedir una segunda opinión médica constituye un derecho del paciente en los casos en los que se diagnostica o se prescribe un tratamiento para una enfermedad grave o que comprometa significativamente su calidad de vida. Sin embargo se trata de un derecho poco ejercido en Castilla y León, según reflejan los datos del año 2022 de los hospitales públicos de Castilla y León recopilados por la Gerencia Regional de Salud y difundidos por Efe.

Esa estadística ofrece una radiografía de la demanda que este tipo de peticiones tiene en los distintos complejos asistenciales de Sacyl distribuidos por las nueve provincias de la Comunidad.

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De todos ellos, el pasado año el complejo asistencial de Zamora fue el que registró más demandas de este tipo, con un total de 18, seguida de los hospitales de El Bierzo, con diez; y de Burgos, Soria y León, que registraron nueve cada uno de ellos. La relación se completa con las seis segundas opiniones médicas solicitadas en Ávila, las tres de Palencia y el Clínico Universitario de Valladolid y las dos que se contabilizaron tanto en Aranda de Duero como en Salamanca, Segovia y el hospital Río Hortega de Valladolid.

Desconfianza en el diagnóstico

Las principales razones para solicitar una segunda opinión médica tienen que ver con la desconfianza en el diagnóstico y la necesidad de corroborarlo por parte de los pacientes, así como con la esperanza de poder evitar intervenciones que impliquen un elevado riesgo vital para la persona.

Asimismo, se recurre a ella cuando el primer tratamiento no ha resultado eficaz o se han sufrido malas experiencias en el pasado.

Sea como fuere, la segunda opinión médica forma parte de una nueva cultura sanitaria más participativa y accesible, centrada en el paciente como protagonista y partícipe activo en la toma de decisiones que afecten a su salud.

En este sentido, asume una mayor responsabilidad en su propio proceso terapéutico, al tiempo que puede elegir entre diferentes alternativas con el mayor nivel de información posible, según apuntaron fuentes de la Consejería de Sanidad de la Junta de Castilla y León.

Pese a todo, las solicitudes no siempre encuentran la comprensión de la Administración, que en algunos casos las rechaza al no ajustarse a los supuestos en los que es posible pedir una segunda valoración sanitaria.

De hecho, en un tercio de los casos el paciente no logra su propósito de contar con una segunda opinión, ya que de las 75 peticiones registradas el pasado año en el conjunto de la comunidad, en 23 casos se denegó la solicitud al no corresponden a uno de los casos en los que se permite esa nueva valoración médica, que están recogidos en la orden de Sanidad 359/2008 de 28 de febrero.

Cuando se registra la petición, la Sanidad pública de Castilla y León (Sacyl) tiene un plazo de 35 días para emitir una respuesta sobre si accede o no a que un segundo profesional sanitario valore su caso.

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