El Obispado aspira a convertir el entorno de la Catedral en un polo de atracción cultural

El Obispado de Zamora quiere convertir el entorno de la Catedral en un lugar vivo más allá de la postal. Hace meses que un equipo dirigido por Monseñor Fernando Valera trabaja en un proyecto que busca adecuar todo este espacio urbano para dotarlo de contenido y conseguir así que vuelva a ser un lugar de tránsito, ocio y actividad tanto para los visitantes como para los propios vecinos. Fruto de este anhelo, el prelado ha recibido en dependencias eclesiásticas al director general de Patrimonio de la Consejería de Cultura de la Junta de Castilla y León, Juan Carlos Prieto, al que le ha expuesto la iniciativa y con quien ha abordado asuntos clave en materia de tramitación y burocracia. Un encuentro que ha servido para que denominado plan «Entorno de la Catedral» reciba uno de los espaldarazos más anhelados desde la parte diocesana.

La Catedral y los inmuebles de la zona constituyen un espacio de alto interés que hay que promocionar para convertirlo en punto de atracción cultural para los zamoranos y sus habitantes. Esa es la tesis defendida por Fernando Valera, quien ha insistido en «poner al servicio de los ciudadanos todo lo que la diócesis tiene». El obispo, desde su llegada, ha manifestado su interés por estar cerca de las necesidades de la ciudad y la provincia, de manera que ha trabajado para poner en valor los recursos patrimoniales para convertir a esta tierra en referente cultural y en un destino de excelencia turística.

El obispo ha señalado que los templos nacieron para la atención religiosa de los creyentes, pero que actualmente «constituyen un reclamo turístico de primer orden en el que la Iglesia de Zamora tiene mucho que aportar». Algo que hará conservando debidamente sus bienes muebles e inmuebles, restaurándolos si fuera necesario y ofreciendo nuevos espacios que terminen convirtiéndose en propuestas explícitas para el diálogo entre la fe y la cultura.

A lo largo de los últimos meses, han recordado desde el Obispado de Zamora, han sido varias las actuaciones realizadas en el entorno de la Catedral orientadas a consolidar el Archivo Histórico y proyectar el nuevo Museo Diocesano. Un trabajo reconocido por la Dirección General de Patrimonio de la Junta de Castilla y León, que ha puesto encima de la mesa la posibilidad de realizar un plan director que haga el proyecto viable y sostenible en el tiempo. La administración autonómica ha visto con buenos ojos los pasos dados por parte de la diócesis, especialmente la creación de un equipo multidisciplinar que, además, ha buscado el asesoramiento técnico de empresas especializadas de prestigio para la consecución de sus objetivos.

Monseñor Fernando Valera ha agradecido el interés de la Junta de Castilla y León en el proyecto «Entorno de la Catedral» y ha expresado su deseo de que puedan acelerarse los trámites para que, a la mayor brevedad posible, la capital ofrezca un espacio atractivo en torno a la Seo que contribuya así al desarrollo integral del territorio, principalmente en las materias tocantes al turismo.

El Obispado de Zamora, al margen del plan «Entorno de la Catedral», está inmerso en otro proyecto para sumar las torres de San Juan, San Vicente y Santa María la Nueva a la oferta turística de la capital. Una iniciativa que nace de la firme vocación de poner los bienes eclesiásticos al servicio de la sociedad que la diócesis lleva a rajatabla desde la llegada de Fernando Valera. Por eso, aunque no es misión de la Iglesia Católica el desarrollo del turismo, sí que se ha visto preceptivo abrir las puertas a la ciudadanía zamorana de algo que, en cierto modo, también es suyo.

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