Veinte años le ha costado a Jose Fraile convencer a Josele, su padre, de que se uniera con él a practicar su principal pasión, un vuelo en paramotor. Pero como nunca es tarde cuando la dicha es buena, Josele surcó los cielos sobre Andavías el pasado 11 de junio, con 88 años y acompañado de su hijo.

Padre e hijo compartieron unos minutos de vuelo sobre la tierra del Pan, un viaje que ofreció unas vistas privilegiadas de la comarca y del embalse de Ricobayo, favorecidas por un cielo claro. Un vuelo que permite a Josele conocer de primera mano la afición de su hijo, dueño de la empresa “DsdArriba Paramotor”. “Estoy pletórico, para mí ha sido un regalo poder volar con mi padre”, aseguró al tomar tierra.