Zamoranos educados a través de la industria de la moda

Alumnos del Sagrado Corazón de Jesús organizan un desfile para concienciar sobre la contaminación de este sector

ZAMORA. DESFILE SLOW FASHION PROTAGONIZADO POR LOS ALUMNOS DE CUARTO DE ESO DEL COLEGIO SAGRADO CORAZON DE JESUS AMOR DE DIOS

ZAMORA. DESFILE SLOW FASHION PROTAGONIZADO POR LOS ALUMNOS DE CUARTO DE ESO DEL COLEGIO SAGRADO CORAZON DE JESUS AMOR DE DIOS / ANA BURRIEZA

Beatriz Blanco García

Beatriz Blanco García

La moda a precios bajos hace que muchos jóvenes opten por comprar por Internet prendas que a veces ni siquiera llegan a estrenar. Llenan los armarios de jerséis, pantalones, trajes o camisas por pocos euros. Una tendencia en alza que quiso poner sobre la mesa la profesora Menchu Hidalgo Barrios, del colegio Sagrado Corazón de Jesús-Amor de Dios en la clase de Economía con sus alumnos de 4º de la ESO.

“Decidí comenzar analizando cómo se fabrica para esas tiendas de precios bajos y que sueldos y condiciones laborales tienen sus empleados, con su posterior impacto”, señala. Un trabajo que luego se amplió al estudio del impacto medioambiental de la fabricación de estas prendas y que se ha concretado con el desfile que este jueves han realizado los estudiantes a las puertas del colegio, en el que han paseado con prendas que tenían olvidadas en lo más profundo de sus armarios o ropa de sus padres y abuelos.

Un desfile profesional

Con estos diseños reciclados salieron a la calle entre los aplausos del resto de los compañeros, mientras que dos presentadores explicaban los litros de agua que había costado realizar estos conjuntos. De hecho, cada prenda llevaba colgada una gran etiqueta con esa información.

Nace así la primera edición de la Slow Fashion con los alumnos de 4º de la ESO, con el objetivo de concienciar sobre el proceso contaminante en la elaboración de prendas y la huella ambiental de la industria textil.

El desfile finalizó lanzándose algunas claves sobre el papel activo que los consumidores pueden jugar para luchar contra esta contaminación, que pasa por cuidar mejor la ropa, apostar por el mercado de proximidad, elegir tejidos de buena calidad para que se mantengan en el tiempo o buscar prendas de segunda mano, así como vender aquellas que ya no se utilicen, para darles una segunda oportunidad.