El terremoto de Siria, desde Zamora: "Hay que pensar en las personas"

Las cifras son devastadoras: más de 21.700 muertos y 70.00 heridos. Ese es el resultado —provisional— del terremoto que afectó a Turquía y norte de Siria a comienzos de esta semana. Una terrible noticia que afectó de manera especial a Majad El Din Hamdan, sirio que reside en Zamora desde hace ya siete años, pero que nunca ha perdido el contacto con familiares y amigos de su país natal.

"Llegaba de una entrevista de trabajo y me encontré a mi mujer llorando en casa. Creí que le había pasado algo a los niños y cuando le pregunté, ella me enseñó los vídeos del terremoto", relata el joven sobre cómo se enteró de la noticia de la catástrofe.

Su primera reacción fue llamar a todos los conocidos que tenía en el norte del país, donde había ocurrido el suceso. Aunque él es natural de una localidad al oeste de Damasco, la capital de Siria, en la zona norte residen sus tíos y varios amigos. "Nadie tenía cobertura, así que me puse en lo peor", recuerda. Una preocupación que fue en aumento hasta que, tres días después, recibió noticias de ellos. "Mi familia está bien, pero he perdido a un amigo con su mujer y su hija", lamenta.

En la calle

En estos momentos, la mayoría de los supervivientes que él conoce han sido trasladados a otros lugares más seguros, "pero se han quedado sin nada, en la calle, y, aunque en el terreno hay ya organizaciones trabajando para ayudar a estas personas, no será suficiente para todos. Y algo se tiene que hacer, porque en estas fechas hace mucho frío", advierte.

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Bajo su parecer, la comunidad internacional ha reaccionado de una manera "demasiado lenta" a la hora de proporcionar ayuda. "Tenían que haber estado desde el primer día", considera. Atento a las noticias durante las 24 horas, se hace eco de las palabras de un periodista en la zona, quien traslada que ya apenas se oyen voces entre los escombros, "por lo que asegura que la ayuda ya no servirá ahora para nada, porque ya se ha salvado a todo el que se ha podido, con mucha tristeza, aunque es verdad que todavía tengo esperanzas de que se pueda rescatar a más gente atrapada entre los edificios que se han derrumbado, porque puede que aún haya alguien vivo", confía Hamdan.

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Aplausos a España

Una excepción a esta falta de urgencia la reconoce en el Gobierno de España, al que le quiere agradecer públicamente su labor. "Fue el primero que envió un equipo de rescate e ingenieros para trabajar en la zona, mucho antes que cualquier otro país, llegando al norte de Siria para ayudar en las labores de rescate. Fueron los primeros de Europa que escucharon al pueblo sirio", aplaude.

Majad El Din Hamdan es también presidente de la Asociación Siria en España. Bajo esas siglas se organizó esta semana una concentración en Soria para llamar la atención sobre los damnificados en el norte de Siria. "Son los que más nos preocupan ahora, porque sabemos que el terremoto también ha afectado a Turquía, pero allí tienen un gobierno estable y su presidente, Erdogan, ya ha asegurado que dispone tanto de recurso como de maquinaria para poder reconstruir el país, pero, en nuestro caso, es mucho más difícil, no tenemos capacidad ya no solo para reconstruir, sino ni siquiera para quitar los escombros", denuncia.

Presión al gobierno sirio

En este sentido, aboga por que los gobiernos de otras naciones puedan presionar a Siria a que dejen entrar tanto las ayudas internacionales como la maquinaria para poder trabajar. "Los que controlan el gobierno tan solo se preocupan de si hay terroristas en el país, pero está claro que ni los niños, ni las mujeres ni los ancianos lo son, y ahora es de quienes se tienen que preocupar. Es tiempo de pensar en las personas y no en los posibles terroristas. Esto no tiene nada que ver con la guerra, que dejen que lleguen al final las ayudas al terreno", implora, preocupado por la situación de sus compatriotas.

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