Los zamoranos pudieron disfrutar ayer con el singular espectáculo de Nacho Diago, titulado como “Días de nocilla y magia”, que llevó a escena en el teatro Ramos Carrión para relatar la vida de un niño que deseaba ser mago y que lo logró aunque no parecía tener aptitudes para ello. La obra que combina el teatro con los recuerdos, los miedos, el humor, la magia y aquellos sándwiches de nocilla que aún perviven en las meriendas de los más pequeños logró mantener al público pendiente de la creación del mago y actor. Nacho Diago triunfó con una propuesta desarrollada para todos los públicos, para poder ver en familia.